El discernimiento es un don del Espíritu a la Iglesia, al cual se responde con la escucha
Por José María Lorenzo Amelibia
Por lo tanto, dijo el Santo Padre, los invito a cultivar una actitud de escucha, creciendo en la libertad de renunciar al proprio punto de vista, para asumir aquel de Dios. Sin dejarse condicionar por la mirada de los demás. “La misión que les espera – agregó el Papa – no es llevar ideas y proyectos propios, ni soluciones abstractamente ideadas por quien considera la Iglesia como un huerto de su casa, sino humildemente, sin protagonismos o narcisismos, ofrecer su concreto testimonio de unión con Dios, sirviendo al Evangelio que debe ser cultivado y ayudado a crecer en esta situación específica. Por lo tanto, discernir significa – subrayó el Pontífice – humildad y obediencia. Humildad respecto a los propios proyectos. Obediencia respecto al Evangelio, criterio último; al Magisterio, que lo custodia; a las normas de la Iglesia universal, que lo sirven; y a las situaciones concretas de las personas, para las cuales no se quiere otra cosa que sacar del tesoro de la Iglesia cuanto es fecundo para su salvación”.
PorJosé María Lorenzo Amelibia
Me gusta esto:
Me gusta Cargando...
Relacionado