Francisco viajará a Lisboa del 2 al 6 de agosto

Francisco JMJ Lisboa 2023
Francisco JMJ Lisboa 2023

Bergoglio llegará a la capital portuguesa el 2 de agosto, y permanecerá hasta la clausura de la cita, el 6 de agosto

Se trata de una visita mucho más larga de lo que podía preveerse dada la salud del Papa, y que también puede interpretarse como un gesto de vitalidad del pontífice

PorJesús Bastante

El Papa Francisco acompañará durante casi toda la JMJ de Lisboa a centenares de miles de jóvenes, tal y como ha anunciado el portavoz de la Santa Sede, Matteo Bruni. En concreto, Bergoglio llegará a la capital portuguesa el 2 de agosto, y permanecerá hasta la clausura de la cita, el 6 de agosto.

El viaje, respondiendo «a la invitación de las autoridades civiles y eclesiásticas de Portugal», incluirá una visita al santuario de Fátima el 5 de agosto, antes de la multitudinaria Vigilia con los jóvenes de los cinco continentes. En un principio, la llegada del Papa estaba prevista la tarde del jueves.

Programa de la JMJ de Lisboa
Programa de la JMJ de Lisboa

Se trata de una visita mucho más larga de lo que podía preveerse dada la salud del Papa, y que también puede interpretarse como un gesto de vitalidad del pontífice, que además quiere acompañar a los jóvenes que acudirán a Lisboa, cuatro años y una pandemia después de la última cita mundial, que tuvo lugar en Panamá, del 22 al 27 de enero de 2019. De hecho, la JMJ de Lisboa estaba prevista, en principio, para 2022, pero tuvo que ser retrasada por el impacto de la crisis del coronavirus.

Pasará por España… en avión

Tanto a la ida como a la vuelta, Francisco sobrevolará territorio español, aunque no se prevé, salvo sorpresa mayúscula, que cruce la frontera (que volverá a activarse dada la ingente cantidad de peregrinos que acudirán a la desembocadura del Tajo) para pisar nuestro país. No se descarta que, como en otras ocasiones, pueda encontrarse con víctimas de abusos a menores, después de la investigación llevada a cabo por una comisión independiente, y que se saldó con 4.815 víctimas oficiales y una inédita petición de perdón del episcopado luso.

Hace dos semanas, el Papa publicaba un vídeo invitando a los jóvenes a peregrinar, junto a él, a la JMJ de Lisboa. «Participar en la jornada es una ilusión. Prepárense y pongan esperanza. En una jornada así se crece mucho, los valores y las relaciones que hacemos con otros jóvenes, quedan dentro de uno mismo», decía Bergoglio en el mensaje. «Para prepararse bien, traten de encontrarse con las raíces, con los ancianos«, culminaba Francisco. Ahora él, ya un anciano, se volverá a encontrar con los jóvenes, como ya hiciera en las JMJ de Río (2013), Cracovia (2016) y Panamá en 2019.

II Plan Nacional de DD.HH.

El Gobierno aprueba un Plan Nacional de Derechos Humanos e intenta retratar el negacionismo de Vox

Historia de RAÚL PIÑA

Nadia Calviño, Isabel Rodríguez y Félix Bolaños, al término de la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros.© Chema Moya/EFE

El Consejo de Ministros ha aprobado el II Plan Nacional de Derechos Humanos, 15 años después de que se aprobara el último, en 2008. El texto tiene el propósito de asentar derechos e introducir nuevos en función de la evolución de la sociedad y los nuevos desafíos, por ejemplo, garantizar la promoción y disfrute de un medio ambiente o garantizar la salud de la población frente al cambio climático.

Se trata de un plan cuyo objeto es la mejora de la protección y disfrute de todos los Derechos Humanos sobre la base de la Declaración Universal, los Pactos Internacionales de 1966 y todos los Tratados específicos ratificados por España. Además, tomará en consideración la indivisibilidad e interdependencia de los Derechos Humanos.

Este texto ha contado con la participación de expertos y también de los distintos grupos políticos del Congreso, salvo Vox. Así lo ha expuesto el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, tras el Consejo de Ministros: «Ha habido aportaciones de los grupos del Congreso. Sólo ha habido un grupo que ha despreciado por completo este plan, al cual le traen sin cuidado los derechos». No lo ha nombrado, pero el ministro se refería a Vox.

Además de combatir discursos de partidos de derechas y blindar derechos -que constituye precisamente uno de los ejes del PSOE en este ciclo electoral del 23-J-, lo que persigue el texto elaborado por el Ejecutivo es proteger el planeta contra la degradación ambiental y prevenir el impacto negativo sobre el disfrute de los Derechos Humanos, a través del consumo y producciones sostenibles, la gestión sostenible de los recursos naturales; así como la aplicación de medidas urgentes contra el cambio climático.

Así, apuesta por el «desarrollo de la política nacional de adaptación al cambio climático, de cara a promover la acción coordinada y coherente frente a los efectos del cambio climático en España, con el fin de evitar o reducir los daños presentes y los futuros derivados del cambio climático y construir una economía y una sociedad más resilientes».

UN TEMA CONFLICTIVO

col otalora

La Congregación para la Doctrina de la Fe, ya en la época de J. Ratzinger, valoraba la complejidad de la homosexualidad cuando la señalaba como “no conforme” con la enseñanza de la Iglesia católica. Y aceptaba, de entrada, que el hecho homosexual tiene múltiples dimensiones. Naturalmente que en aquella época la rigidez se imponía en la valoración de la práctica homosexual haciendo tabla rasa contra ella. Ahora es una realidad social que cuenta con posturas de rechazo, pero también con la consideración y el respeto hacia quienes se sienten de diferente manera.

De igual manera nos ocurre dentro de la propia Iglesia, donde la realidad homosexual acoge interpretaciones y posicionamientos sociales de rechazo y aceptación. Personas competentes en lo teológico, en lo pastoral y en definitiva, en los fundamentos cristianos, no condenan ni excluyen a este colectivo, bastante significativo ya incluso en el laicado católico y entre el estamento clerical.

Han sido muchos años de persecución social y religiosa, donde las condenas excluyentes han ido mucho más allá de una desautorización, llegando a satanizar al colectivo gay de manera inmisericorde, es decir, desde una actitud claramente antievangélica. Qué no decir de los cambios de sexo, donde se juzgan hechos y no intenciones o consideraciones personales, valorando cada caso con discernimiento, como se resalta en la Exhortación Amoris Laetitia. Todo ello merece una mirada más jesuánica y cristiana, al menos en paralelo a la ortodoxia que ha llegado a proponer centros de sanación para gays y lesbianas. Yo sigo reivindicando el Dicasterio de la Ortopraxis, donde lo esencial, las actitudes de amor, sea la piedra de toque de toda la arquitectura católica.

Al menos el Papa Francisco ha dejado claro que la homosexualidad no es un delito y que  hay que terminar con la legislación injusta (sic) que penaliza las relaciones homosexuales en todo el mundo, o discrimina a la comunidad LGBTQ+. «Sí, (la Iglesia) tiene que trabajar para abrogar esas leyes. Lo que pasa es que algunos obispos tienen pendiente un proceso de conversión”… para alejarse de la homofobia, añado yo. El Papa tampoco se olvida de pedir a los padres y madres (2022) que no condenen a sus hijos si tienen una “orientación sexual diferente”.

Pero vayamos al meollo del asunto. Excluidos en tiempos de Jesús hubo muchos, mujeres y niños, extranjeros, recaudadores, enfermos varios, pecadores de todo signo, samaritanos… Y la actitud de Jesús fue siempre de acogida, e incluso de sanación aun en contra las normas sacrosantas que lo impedían. ¿Por qué se comportó así? Por amor; sencillamente hizo lo que cualquiera hubiésemos hecho con un ser muy querido para nosotros, que es lo que somos todos y todas para Dios. Y a partir de aquí, viene lo particular: no es posible rechazar a todo el colectivo homosexual, incluso a los que se esfuerzan por amar ejemplarmente con verdadera entrega evangélica.

No es importante saber por qué sienten atracción por los de su mismo sexo. Pero lo esencial es que pueden amar radicalmente, sentirse entregados al amor del otro o de la otra de manera ejemplar e incluso heroica, y hacerlo ejemplarmente desde su única sensibilidad conocida. Y muchos lo hacen. ¿Dónde está el delito, la desviación moral? Si aman de corazón a su pareja, ¿qué tenemos que condenar? No estoy justificando o desacreditando la homosexualidad; estoy defendiendo el amor limpio y puro, hecho por Dios que dignifica a quienes lo practican, dando por hecho que hay personas en torno al colectivo LGBTQ+ tan maravillosas y egoístas como en el colectivo heterosexual.

¿Son mejores cristianos los heterosexuales, por serlo, que los homosexuales, aunque estén comprometidos por amor con su pareja del mismo sexo? No debemos estigmatizar a este colectivo prescindiendo de sus actitudes; que también para ellos vale la sentencia “Por sus hechos los conoceréis”. He tenido la suerte de conocer a varias personas homosexuales y no entiendo que se mantenga el estigma, incluso entre gentes piadosas. ¿Será otra forma encubierta de racismo, como el del color de piel? Jesús en el Evangelio ilumina el buen camino

Los cristianos en la revolución

En Nicaragua, sin la participación de los cristianos no se hubiera logrado el triunfo de la revolución de 1979

Managua, 1983

«Frente a la persecución y el asedio que está pasando la Iglesia católica de Nicaragua es fácil hacer una crítica a los cristianos que, antes del triunfo de la revolución, y sobre todo en la década de los 80´s se arriesgaron a participar en aquel proceso»

«Quiero explicar lo que fueron nuestras opciones motivadas desde el Evangelio y orientadas a dar un testimonio profundamente cristiano. ¿Cuál era nuestra propuesta para acompañar este ‘proceso’? Simplemente una lectura dinámica de la historia»

«La carta pastoral ‘firmada’ por los obispos en noviembre de 1979 y apoyada por el encargado de la nunciatura apostólica, animó a muchos católicos a una visión abierta, positiva y profética en aquellos primeros días»

«Crear un nuevo sujeto de la historia, un nuevo proyecto participativo y democrático, es el camino para enfrentar la crisis: Superar las contradicciones ofreciendo al pueblo una luz de esperanza sin cerrarse a la novedad que ofrecía la revolución de 1979 en sus primeros años»

Por | Pedro Lanzas. Sacerdote católico

Frente a la persecución y el asedio que está pasando la Iglesia católica de Nicaragua y la irracionalidad de acusar a sus líderes de traidores a patria entre otros epítetos; es fácil hacer una crítica a los cristianos que, antes del triunfo de la revolución –y sobre todo en la década de los 80´s se arriesgaron a participar en aquel proceso-, tuvieron experiencia de vivir aquellos años y que fueron capaces –por medio de publicaciones muy motivadoras para los creyentes dentro y fuera del país-, de crear una amplia cadena de solidaridad y compromiso con todo lo que vivíamos en aquella década.

Hay publicaciones en las que se afirma taxativamente: Sin la participación de los cristianos no se hubiera logrado el triunfo de la revolución de 1979. Los que vivimos aquella experiencia podemos dar cuenta de esta afirmación.

La crítica más fuerte que nos hacen las nuevas generaciones, nacidos ya distantes de los primeros años del triunfo revolucionario, es que estuvimos ciegos. Que no quisimos ver las consecuencias a las que nos iba a llevar la revolución por falta de una iglesia unida, que se enfrentara a los “errores” del directorio del sandinismo y destacan con fuerza los mensajes de Juan Pablo II, especialmente aquel lanzado durante la santa misa celebrada en Managua en su visita al país en 1983: “La unidad de la Iglesia por encima de otras ideologías”.

No quiero ni deseo defender las posturas de los cristianos comprometidos con aquella revolución que hoy nos parece un suceso del pasado, ni analizar los hechos desde una visión retrospectiva y reconocer los errores cometidos, que estoy seguro se cometieron de un lado y de otro. Lo que sí quiero es explicar lo que fueron nuestras opciones motivadas desde el Evangelio y orientadas a dar un testimonio profundamente cristiano, con las limitaciones propias de los seres humanos y del calor que avivaba nuestra fe, esa que queríamos vivir inmersos en la realidad del pueblo.

¿Cuál era nuestra propuesta para acompañar este “proceso”? Simplemente una lectura dinámica de la historia. Desde ella veíamos que los cambios sociales que se anunciaban en la revolución era un paso hacia adelante en el devenir histórico del país. Ese paso dado con la participación de los cristianos y la Iglesia, pensábamos que podíamos acompañar aportando los valores propios del Evangelio. La carta pastoral “firmada” por los obispos en noviembre de 1979 y apoyada por el encargado de la nunciatura apostólica, animó a muchos católicos a una visión abierta, positiva y profética en aquellos primeros días.

Los creyentes analizábamos los momentos de grandes cambios en la historia occidental donde la Iglesia jugó papeles ambiguos, como el paso de la Edad Media al Renacimiento; con la persecución de Galileo Galilei donde el magisterio eclesiástico cuatro siglos después tuvo que pedir perdón.

Las grandes transformaciones que trajo la revolución francesa en el siglo de las luces, rechazadas en su tiempo por la jerarquía eclesiástica y ampliamente aceptadas siglos después en el Concilio Vaticano II. Desde esa lógica, la participación de los cristianos en los movimientos populares del continente latinoamericano tenía un atractivo y una gran convocación. Profundamente cuestionada por el Vaticano durante el Papa Wojtyla, éste hizo abortar el sueño que animaba a miles de católicos en América y el mundo en general.

En noviembre del año 1980 fui invitado a Cubapara compartir la experiencia de los cristianos en la revolución nicaragüense con la generación joven del Partido Comunista de Cuba (PCC). Les llamaba mucho la atención que el pueblo cristiano, mayormente católico, participara en los procesos de cambio en Nicaragua, Guatemala, El Salvador y en general, en toda América Latina.

Aquella era una generación nueva, que en la actualidad está rondando los 70 a 75 años. Muchos de ellos recordaban su niñez y juventud participando en la Iglesia católica como acólitos, venían de familias profundamente cristianas y tenían mucho interés en plantear un cambio en la dirección del PCC sobre los asuntos de la religión. Se desahogaban en secreto conmigo cuando quedábamos solos en la habitación del hotel Habana Libre de la capital cubana.

Este primer encuentro abrió todo un proceso de posibilidades de profundos cambios en la isla. Continuaron los encuentros con sacerdotes y agentes de pastoral laicos de El Salvador, Guatemala y después, organizaron el primer encuentro con teólogos y teólogas de las diferentes iglesias de Estados Unidos. Fui -una vez más-, invitado para compartir nuestra experiencia y acompañar a los invitados por el PCC a la isla.

Los cubanos siguieron los contactos con destacados teólogos europeos. Esto llevó al PCC a la creación de un centro de análisis sobre sociología de la religión y preparar un equipo de militantes en universidades católicas de Europa, y prepararse para plantear un comportamiento nuevo del diálogo con el hecho religioso. Dentro de esta estrategia juega un papel destacado la presencia de Frei Betto con la publicación de su libro Fidel y la Religión. Fruto de estos encuentros fue el cambio profundo de la Constitución de la isla. En el congreso del PCC del año 1992 se pasó de una carta magna confesionalmente atea a una de corte laico.

¿Qué ha quedado de aquel proyecto que nació lleno de esperanza e ilusión? ¿Qué ha quedado de los sueños que animaron nuestro compromiso? ¿Fueron una vaga ilusión? No. La historia tiene sus niveles de crecimiento y retroceso. Pero los momentos fundantes de un salto de calidad se mantienen como inspiradores de algo nuevo.

La revolución francesa fue traicionada por sus mismos actores. Pero queda en la historia como un momento de cambio que llega hasta el día de hoy. La democracia tan cacareada por todos los líderes políticos es fruto de aquel levantamiento de 1789. Los derechos humanos y el estado de derecho son valores, todos ellos asumidos por la oposición nicaragüense que son herencia de aquel proceso histórico, a pesar de los errores que pudieron darse por parte de sus mismos ideólogos.

El proceso de Nicaragua actualmente puede dar marcha atrás tanto en lo ideológico como en lo político y religioso. Basta con escuchar las declaraciones y testimonios de los expatriados, asilados, y tienen razón en su experiencia. Pero esto no puede llevarnos a una nueva contradicción.

Salir del régimen de la familia Ortega-Murillo para imponer un gobierno que corte cabezas, excluya y margine, no solo a los que han cometido crímenes de lesa humanidad, sino a todo lo que huela a revolución y a sandinismo es apartar un momento de gran creatividad en la historia y motivador de grandes esperanzas en aquellos que –como yo-, los vivió de forma intensa desde la fe.

El paso que nuestro pueblo tiene que dar no es borrón y cuenta nueva. Esto lo afirma el papa Francisco: “Cada generación ha de hacer suyas las luchas y los logros de las generaciones pasadas –no olvidar la historia por más novedoso que soñemos el futuro- y llevar estas luchas, a metas más altas aún”.

Este es el camino para enfrentar la crisis: Superar las contradicciones ofreciendo al pueblo una luz de esperanza sin cerrarse a la novedad que ofrecía la revolución de 1979 en sus primeros años.

Crear un nuevo sujeto de la historia, un nuevo proyecto participativo y democrático, donde las mayorías populares tomen un papel beligerante. Un estado social de derecho desde la lógica de las mayorías, una integración de la autodeterminación de los pueblos y la soberanía nacional sin menoscabo de la defensa de los derechos humanos con toda su amplitud: sociales, políticos, culturales y sobre todo económicos como respuesta a la lógica de la globalización neoliberal dominante.

Para ello hay que recrear el momento histórico, recogiendo lo mejor del pasado y abrirse a un presente esperanzador hacía un futuro de paz con justicia social y desarrollo humano integral para todos los nicaragüenses.

Informe del Consejo Europeo sobre DDHH en España

La comisaria de Derechos Humanos del Consejo de Europa emite un demoledor informe contra España

La comisaria de Derechos Humanos del Consejo de Europa, Dunja Mijatovic, ha presentado un duro informe contra España después de su visita en noviembre pasado para evaluar la situación de los derechos humanos en el país. En su informe, Mijatovic ha pedido cambios en el Código Penal español para reforzar el ejercicio del derecho a la libertad de expresión y ha urgido a revisar la ley mordaza para que cumpla completamente los estándares europeos e internacionales de derechos humanos.

La comisaria ha hecho hincapié en la necesidad de seguir trabajando en la protección de los derechos humanos en España y ha instado al Gobierno a tomar medidas concretas para garantizar la libertad de expresión y el respeto a los derechos humanos en el país.

La comisaria de Derechos Humanos del Consejo de Europa, Dunja Mijatovic, ha señalado que la libertad de expresión en España se ve coartada por las infracciones en el Código Penal relacionadas con el enaltecimiento del terrorismo, los insultos a la Corona y las ofensas a los sentimientos religiosos. En su informe, Mijatovic ha pedido cambios en el Código Penal para garantizar una mayor protección de la libertad de expresión.

Por su parte, el Gobierno ha defendido su postura señalando que la jurisprudencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos “da apoyo” a lo que prevé el Código Penal español sobre enaltecimiento del terrorismo y humillación de las víctimas, así como “a los insultos o difamación a la Corona”. Sin embargo, también reconoce que en algunos casos la aplicación ha sido “de forma desproporcionada”, lo que ha llevado a condenas por parte del Tribunal.

En definitiva, la comisaria Mijatovic ha puesto de manifiesto la necesidad de revisar el Código Penal español para garantizar una mayor protección de la libertad de expresión y el respeto a los derechos humanos en el país.

La comisaria de Derechos Humanos del Consejo de Europa, Dunja Mijatovic, ha expresado su preocupación por la aplicación de la Ley Orgánica de Seguridad Ciudadana del 2015, conocida como ley mordaza, en España. Según Mijatovic, esta ley ha debilitado el ejercicio de las libertades de expresión y de reunión en el país, especialmente en el trabajo de periodistas que cubren protestas y manifestaciones pacíficas.

En su informe, la comisaria ha pedido que se enmiende la ley mordaza para limitar la posibilidad de aplicación arbitraria y desproporcionada, y ha hecho énfasis en la urgencia de que la norma cumpla completamente los estándares europeos e internacionales de derechos humanos. Mijatovic ha destacado la importancia de que se garantice la libertad de expresión y reunión en España, y ha señalado que la ley mordaza no cumple con los estándares europeos de derechos humanos.

Aunque la comisaria ha valorado positivamente la voluntad del Gobierno para revisar la ley mordaza, ha señalado que el último intento no tuvo éxito debido a la falta de acuerdo entre los partidos políticos.

En su informe, Mijatovic también ha denunciado el uso excesivo de la fuerza por parte de la policía en manifestaciones pacíficas y ha destacado la dificultad en la práctica para investigar los abusos policiales.

La comisaria de Derechos Humanos del Consejo de Europa, Dunja Mijatovic, ha urgido a las autoridades españolas a realizar una evaluación completa y regular de los peligros que suponen las armas no letales que utiliza la policía, como las pelotas de goma o de foam. Mijatovic ha pedido que se realicen informes en los cuales participen órganos de supervisión policial, organizaciones de derechos humanos y profesionales médicos.

En cuanto a la ley mordaza, el Gobierno español se ha defendido en los comentarios del informe, afirmando que el Tribunal Constitucional ha certificado su validez, con la excepción de un párrafo del artículo sobre el uso sin autorización de imágenes o datos recogidos por miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

Sin embargo, la comisaria Mijatovic ha expresado su preocupación por la aplicación de la ley mordaza y ha pedido que se enmiende para garantizar una mayor protección de las libertades de expresión y reunión en España, y para que cumpla completamente los estándares europeos e internacionales de derechos humanos. Además, ha denunciado el uso excesivo de la fuerza por parte de la policía en manifestaciones pacíficas y ha destacado la importancia de investigar los abusos policiales.

Emigrar: una decisión libre

Mensaje para la 109ª Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado 2023.

Papa Francisco: «Migrar debería ser siempre una decisión libre”

El Santo Padre advierte sobre la urgencia de políticas trasparentes y honestas, además del respeto de los derechos humanos para eliminar las migraciones forzadas causadas por las persecuciones, las guerras, los fenómenos atmosféricos y la miseria.

Por Johan Pacheco, Ciudad del Vaticano

En el mensaje para la 109ª Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado publicado este 11 de mayo, el Papa Francisco reflexiona sobre la “libertad de migrar o quedarse” lo cual exige una participación equitativa del bien común y respeto a los derechos humanos. La jornada será celebrada el domingo 24 de septiembre de 2023.

“Los flujos migratorios de nuestros días son expresión de un fenómeno complejo y articulado, cuya comprensión exige el análisis atento de todos los aspectos que caracterizan las diversas etapas de la experiencia migratoria, desde la partida hasta la llegada, incluyendo un eventual regreso”, expresa el Santo Padre en el mensaje titulado “Libres de elegir si migrar o quedarse”.

Como ejemplo de una migración forzada, recuerda en el mensaje la huida de la Sagrada Familia: “El Ángel del Señor se apareció en sueños a José y le dijo: Levántate, toma al niño y a su madre, huye a Egipto y permanece allí hasta que yo te avise, porque Herodes va a buscar al niño para matarlo” (Mt 2,13).

«Migrar debería ser siempre una decisión libre; pero, de hecho, en muchísimos casos, hoy tampoco lo es”, denuncia Francisco. Indicando además que los “conflictos, desastres naturales, o más sencillamente la imposibilidad de vivir una vida digna y próspera en la propia tierra de origen obligan a millones de personas a partir”.

La migración forzada contemporánea

En el mensaje menciona algunas de las causas más visibles de la migración forzada contemporánea: las persecuciones, las guerras, los fenómenos atmosféricos y la miseria. Los migrantes escapan debido a la pobreza, al miedo, a la desesperación.

“Para eliminar estas causas y acabar finalmente con las migraciones forzadas es necesario el trabajo común de todos, cada uno de acuerdo a sus propias responsabilidades”, dice Francisco. Insistiendo también en la urgencia “por detener la carrera de armamentos, el colonialismo económico, la usurpación de los recursos ajenos, la devastación de nuestra casa común”. 

“Para que la migración sea una decisión realmente libre – señala Francisco en el mensaje-, es necesario esforzarse por garantizar a todos una participación equitativa en el bien común, el respeto de los derechos fundamentales y el acceso al desarrollo humano integral. Sólo así se podrá ofrecer a cada uno la posibilidad de vivir dignamente y realizarse personalmente y como familia”.

Políticas transparentes  

El Papa Francisco advierte que la tarea principal para que la migración sea libre, corresponde a los países de origen y a sus gobernantes: “llamados a ejercitar la buena política, transparente, honesta, con amplitud de miras y al servicio de todos, especialmente de los más vulnerables”. Sin embargo, asegura también ellos “han de estar en condiciones de realizar tal cosa sin ser despojados de los propios recursos naturales y humanos, y sin injerencias externas dirigidas a favorecer los intereses de unos pocos”.

Camino al Jubileo del 2025, el Santo Padre recuerda un acto de justicia iluminado por la Sagrada Escritura: “En este año jubilar cada uno de ustedes regresará a su propiedad” (Lv 25,13). Y exhorta a “un esfuerzo conjunto de cada uno de los países y de la comunidad internacional para que se asegure a todos el derecho a no tener que emigrar, es decir, la posibilidad de vivir en paz y con dignidad en la propia tierra”.

El encuentro con Cristo a través del migrante

Finalmente, hace resonar las palabras del Evangelio: “Porque tuve hambre, y ustedes me dieron de comer; tuve sed, y me dieron de beber; estaba de paso, y me alojaron; desnudo, y me vistieron; enfermo, y me visitaron; preso, y me vinieron a ver” (Mt 25,35-36), invitando a todos a practicar las obras de misericordia con los migrantes mientras se trabaja “para que toda migración pueda ser fruto de una decisión libre”.

“Y esto significa –dice el Papa- acompañar y gobernar los flujos del mejor modo posible, construyendo puentes y no muros, ampliando los canales para una migración segura y regular. Dondequiera que decidamos construir nuestro futuro, en el país donde hemos nacido o en otro lugar, lo importante es que haya siempre allí una comunidad dispuesta a acoger, proteger, promover e integrar a todos, sin distinción y sin dejar a nadie fuera”.

Causas de una derrota anunciada

PEDRO LUIS ANGOSTO

En el PP hubiera dado igual que el candidato principal hubiese sido Núñez Feijoo o Don Tancredo, el ambiente callejero mostraba sin mucho lugar a dudas una evidente derechización del electorado.

Aunque con unos resultados peores de lo esperado por sus dirigentes, el Partido Socialista ha resistido a duras penas, mientras que todo el conglomerado a su izquierda ha naufragado de forma estrepitosa, hasta tal punto que es difícil imaginar la manera en que puedan volver a flote. Respecto a la derecha, creo que habría dado igual que el candidato principal hubiese sido Núñez Feijoo o Don Tancredo, el ambiente callejero mostraba sin mucho lugar a dudas una evidente derechización del electorado, cuyas causas intentaremos analizar sin más intención que aportar una opinión más a un debate que será largo y complicado.

Independientemente de los errores cometidos por el Partido Socialista y Podemos, creo que su acción de gobierno ha sido buena para el país en un tiempo en extremo difícil. Sin embargo, estamos ante una coyuntura nacional e internacional llena de incertidumbre y de miedos, de dudas y amenazas que han provocado un ensimismamiento de la población que la hace refractaria a cualquier política social.

Desde tiempo inmemorial, España ha sido un país que ha odiado a sus dirigentes. El Estado era malo, era el enemigo que perseguía y que impedía el normal desarrollo de las personas. Así fue durante los Austria y los Borbones, así durante la Restauración, así en el franquismo. Pese a que el Estado ya no es el opresor de antaño y, sí, por el contrario, el que organiza gracias a los impuestos de todos las pensiones, la asistencia sanitaria, la educación, las dependencias y todo lo que nos hace distinguirnos de la vida en la jungla, en los últimos años ha calado el mensaje de la ultraderecha que invita a su desmantelación para entregárselo todo a la “sociedad civil”, es decir a las grandes empresas nacionales y globales especializadas en apropiarse del dinero público para organizar unos servicios, que son derechos constitucionales, más caros, más clasistas y más corruptos. Ni ha habido, ni hay como en otros países de Europa, sobre todo del centro y del norte, un respeto y una consideración hacia lo público como algo propio. Todo lo contrario, una parte grande de la ciudadanía piensa que lo público no es de nadie o es del Gobierno, por lo tanto es legítimo despotricar, incluso deteriorar todo aquello que no tiene un dueño con nombre y apellidos. Es algo perfectamente visible en hospitales, escuelas, parques, transportes, montes o polideportivos públicos. Al mismo tiempo que ha crecido esa percepción irracional contra lo público, se ha exacerbado la protección a lo privado, a lo que es de uno porque así lo dice el Registro de la Propiedad. Vallas, cercas, alarmas, perros agresivos protegen hasta la más mínima parcela como si estuviese en riesgo de ser ocupada cualquier día por las ordas marxistas. La propiedad privada, como sucedió en Estados Unidos desde su primera Constitución, es la razón de existir de muchas personas, por pequeña que sea.

No existe tampoco una percepción mayoritaria de que la mujer goce de menos derechos que los hombres, ni siquiera entre las primeras. Al igual que la Patria, la hombría ha sido atacada y muchas personas perciben lenguajes y modos que no se corresponden con su modo de ver las cosas. En ese sentido leyes como la del sólo sí, es sí o la ley trans han supuesto una inversión enorme de fuerzas, un desgaste inmenso del Gobierno sin conseguir sus objetivos, mientras ha dado munición a mansalva a jueces reaccionarios y a los partidos que con ellos caminan.

Como demuestran los resultados de estas elecciones presentadas por la derecha como primarias, a la mayoría de las mujeres le importa un bledo lo que esas leyes defienden. Por si faltaba algo, está el autodenominado lenguaje inclusivo, un lenguaje artificial y estúpido, que no era demandado por casi nadie y que ha servido sobre todo para crear rechazo en un sector del electorado. La corrupción, muchísimo menor en estos últimos cinco años del Gobierno, da votos a quien la comete. Es decir, en España el corrupto es un héroe porque hace lo que muchos ciudadanos querrían hacer, apropiarse de los presupuestos del Estado para beneficio propio. Puesto que el Estado es el enemigo, robar al Estado no está mal visto, sino que el delincuente que tal delito comete pasa a la categoría de guerrillero, de buen ladrón que con su acto se atreve a desafiar al Estado opresor e intervencionista. Hay que luchar contra la corrupción porque es el cáncer de la política, pero esa lucha no es rentable, dado que mucha gente espera más beneficios del clientelismo a ella asociada que de la honradez de los elegidos. Por mucho que nos duela, y a mi personalmente me duele en el alma y no por motivos familiares sino de dignidad, la memoria democrática sólo afecta e interesa a una minoría que no entiende como a estas alturas miles de personas sigan enterradas en cunetas y tapias de cementerio. Eso es pura barbarie, pero a los españoles de hoy en día les parece un discurso del pasado, un dispendio de dinero y, en muchos casos, una forma de abrir heridas que siempre estuvieron abiertas y que no cicatrizarán hasta que se entierre como personas normales a quienes fueron asesinados por el nacional-catolicismo.

Políticas erráticas como la de vivienda no calan en el electorado por muchas que sean las que se prometen. Son promesas a largo plazo que tienen poca credibilidad dado que las competencias son autonómicas y municipales. Es posible que si se hubiese anunciado con presupuestos y proyectos sólidos de la construcción o rehabilitación de miles de viviendas para crear un parque estatal de las mismas, hubiese tenido más calado, aunque tengo mis duda dada la adhesión que existe entre los votantes de derecha a su opción política, que no ha hecho ni una sola propuesta municipal o autonómica que es de lo que se trataba, como si se tratase del equipo de fútbol por el que lo darías todo.

Si antes las campañas electorales influían sobre los indecisos o los dubitativos, ahora casi todo el mundo tiene decidido su voto aunque no lo diga Por último, podríamos seguir enumerando cuestiones, la forma de socialización, de captación de votantes ha cambiado radicalmente. Si antes las campañas electorales influían sobre los indecisos o los dubitativos, ahora casi todo el mundo tiene decidido su voto aunque no lo diga. Las redes sociales, dominadas por su propia naturaleza por la derecha, han creado un ciudadano, un elector, que está incapacitado para la empatía, la solidaridad o las políticas sociales. Nada de lo que suceda fuera de su móvil, de su ombligo, le afecta. Está inmunizado contra el conocimiento, el espíritu crítico y la justicia social. Lo mío, lo que me “roban” con los impuestos para dárselo a vagos, ¿quién es usted para decirme a mí las copas de vino que me tengo que beber? Ese es el lema y esa es la realidad en la que nos toca vivir, una realidad que no es sólo española, que es mundial, pero que en España viene acompañada por el olor a calcetín sudado, que diría Vázquez Montalbán, y el olor a cajonera de caballo con señorito arriba. Todas las cuestiones sucintamente repasadas son de justicia, pero a día de hoy lo que afecte al común no interesa a una buena parte del electorado. Habrá que estudiar la forma de revertir esa situación, que lo hará con el tiempo sin la inteligencia artificial y los mercados lo permiten, pero será preciso de emplear inteligencia y generosidad. En ese sentido, la decisión de Pedro Sánchez de convocar elecciones para julio podría ser un principio. De momento es un loable reconocimiento de que algo no se ha hecho bien y de que lo que se ha hecho bien no ha sido percibido como tal por un electorado cada vez más individualista y crédulo

Otra lectura de las elecciones

¿Ha ganado el PP o ha perdido Podemos?

Por | José Ignacio González Faus

Cuando digo otra no pretendo tener toda la razón, pero sí aportar elementos de reflexión. Dos cosas me dan cierta seguridad: ha ocurrido lo que yo esperaba; aunque no tanto. No siento esa sorpresa que proclaman algunos medios de comunicación. Y la otra cosa es ese otro principio del que estoy cada vez más convencido: las izquierdas desconocen el pecado original mientras que las derechas tienden a aprovecharse de él. He contado otras veces la anécdota de una muchacha venezolana que explicaba: “antes votaba a la izquierda. Chávez me sacó de la pobreza y desde entonces voto a la derecha”. No nos extrañe: todos tendemos más a conservar lo que tenemos que a procurar que tengan algo más aquellos a quienes falta casi todo.

Desde estos parámetros me atrevo a sospechar que una causa muy importante en el resultado del pasado domingo no ha sido la conducta de Feijóo: a mí personalmente me ha decepcionado porque comenzó gritándole a Casado que él quería vencer a Sánchez no con insultos sino con razones; y temo que pronto se olvidó de tan buen propósito y pasó a los adjetivos (o sustantivos) descalificativos, más que a argumentos convincentes: ahí está esa vacuidad del «sanchismo» y otras similares.

Más que Feijóo creo que han sido las leyes de la transexualidad y del “solo sí es sí” las que han jugado un rol importante en los resultados electorales. El PSOE no ha perdido votos por las leyes del salario mínimo, o de las pensiones, o de corrección de la mal llamada reforma laboral (en las cuales, por otro lado, tuvo buena parte UP ante la clásica timidez social del PSOE). La gente sabe que esas leyes del actual gobierno, el PP no las tocará: pues así ha venido actuando ante otras leyes a las que había atacado cuando se propusieron: recordemos incluso la aceptación por Feijóo de la ley del aborto, cuando el TC la convalidó[1]. Lo que ha dado más votos al PP (además de la evaporación de Ciudadanos) han sido las otras leyes citadas al inicio de este párrafo.

En este sentido, me atrevo a pedir a Irene Montero y a Ione Belarra la valentía para reconocer que ellas son las mayores derrotadas y causantes del desastre del gobierno. Hará falta mucho valor para reconocer eso, pero es reconociendo errores como crecemos los humanos. Y es el único camino si es que quieren enderezar las cosas de aquí a las generales. En este sentido explico dos anécdotas vividas recientemente.

Considero que el feminismo es eso que el evangelio llama un “signo de los tiempos” y creo estar de su parte. Otra cosa es de qué feminismo se trata. Me explicaba hace poco una amiga izquierdosa, que ella cree que hay más feministas entre los varones que entre las mujeres. Y me daba esta razón: entre los varones hay muchos que se sienten culpables por el innegable machismo de tiempos pasados y esto los lleva a intentar cambiar: otra cosa (me añadía) es si serán capaces de hacerlo… Pero entre las mujeres hay muchas, sobre todo madres con hijos adolescentes, a quienes asustan las posturas sexuales de algunas feministas. Y le pude contar que, antaño y por dos veces, había escuchado yo algunas explicaciones como esta (de amigas que ya empiezan a ser abuelas): “cuando eres madre, ves las cosas de otra manera: y yo no quisiera de ningún modo que mi hija tuviera una conducta sexual como la que tuve yo de adolescente”. Literal.

Y lo que de ahí me preocupa es este otro dato que considero cierto: hay muchas más mujeres contrarias al feminismo de lo que muchas feministas creen. Y no solo por aquello que me decía bromeando Amparo (ya fallecida) hace bastantes años: “¡con lo bien que se está de mujer objeto!”. Ni por lo que hace unas semanas me decía otra amiga: “en Ucrania los varones tienen prohibido salir del país, porque son necesarios para la guerra, mientras que las mujeres sí pueden salir. De modo que algunas diferencias ya va bien que se conserven…”. No por estas ironías de charla de café. Sino por otra razón más seria con la quisiera acabar.

Expresándola de una manera gráfica: he sido invitado alguna vez a dar charlas a grupos de mujeres, de una bondad y una calidad humana innegables, con innegable sentido social, pero reacias ante todo el discurso feminista. Se trataba solo de explicarles que lo decisivo del feminismo no es más que el respeto a la dignidad de la mujer (igual o superior a la del varón) y que ese respeto se refleje en las leyes. Solo eso que ya es mucho[2]. Es cierto que esas charlas fueron para América Latina, pero no creo que eso les quite todo significado.

Y quisiera terminar con una reflexión que puede formularse desde una óptica más cristiana o de manera más laica.

En el primer sentido: en el evangelio quizá no hay palabra más seria (y más olvidada) que aquella de “no he venido a llamar justos sino pecadores”. A penitencia, claro: pero son ellos los llamados. Pregúntese toda la España laica hasta qué punto no está cayendo en tres abominables defectos que ensombrecieron a la cristiandad pasada, por olvidar esas palabras de Jesús: la mentalidad inquisitorial, el fariseísmo y el desprecio al de fuera. No creo que haga falta declararlo más. Examínense, porfa.

Y en otro sentido, carente de imperativos morales o creyentes, recuerden todos, los de uno y otro lado, aquellos versos tan decisivos de Antonio Machado sobre “esa España que embiste y que bosteza / cuando se digna usar de la cabeza”. Me temo que esa España existe todavía. Mire pues cada cuál si él es patriota de esa patria…

[1] Y quiero recordar, como he dicho otras veces, que yo no creo que exista un derecho al aborto aunque, por razones de bien común, soy claramente partidario de su “despenalización” (que no es lo mismo que derecho)

[2] Y añado por mi cuenta que tampoco me identifico con ese eslogan de la “paridad” que tanto le gusta esgrimir a Pedro Sánchez: el pueblo necesita más calidad que paridad. Y si por los ritmos de la historia, o por lo concreto de algunas situaciones globales o individuales, resultase que, en alguna corporación concreta y para una determinada función, de entre los diez a designar, siete u ocho de los de mejor calidad, son de un mismo género, no veo que tenga sentido quitar al pueblo buenos servidores por razones de paridad. Siempre me acuerdo de aquellos tiempos en que por toda Cataluña no se oía más que el grito: “volem bisbes catalans”, y un catalán bien catalán, pero bien “manfutista” gritaba por su cuenta: “volem bisbes bons”. Para luego añadir: “lo que nos extraña un poco es que, en toda Cataluña no haya un solo cura capaz de ser buen obispo… Cuidado pues con los eslóganes que son muy peligrosos.

Situación de Tigray, Etiopía

Se suspende la ayuda humanitaria a Tigray, más de 500 escuelas siguen cerradas

Tigray, casi sin escuelas
Tigray, casi sin escuelas

En Tigray, el 85% de las escuelas han sufrido daños parciales o totales como consecuencia de la guerra. Más de 22.500 profesores de la región llevan más de dos años sin cobrar. Millones de niños han abandonado la escuela

El Programa Mundial de Alimentos ha suspendido la distribución de ayuda humanitaria «hasta nuevo aviso», debido al descubrimiento de robos a gran escala de alimentos de socorro y su venta en los mercados locales

Por el mismo motivo, la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) también ha suspendido la financiación de la ayuda

(Agencia Fides).- Los estudiantes de la región septentrional de Etiopía llevan tres años sin poder asistir regularmente a la escuela. Concretamente en las partes occidental, meridional y nororiental de Tigray permanecen cerradas porque las zonas siguen bajo la ocupación de las fuerzas eritreas y amhara.

El 85% de las escuelas han sufrido daños parciales o totales como consecuencia de la guerra. Más de 22.500 profesores de la región llevan más de dos años sin cobrar. Millones de niños han abandonado la escuela, primero por la epidemia de coronavirus y luego por la guerra. El 13 de abril, Save the Children dijo que unos 2,3 millones de niños no habían reanudado la escuela en el norte de Etiopía.

Entre finales de abril y principios de mayo de este año, se esperaba que reabrieran algunas instituciones en las principales ciudades de Tigray, incluidos los primeros jardines de infancia y guarderías, seguidos de las escuelas primarias. Además, dada la insuficiencia de recursos de la región, ya se ha tomado la decisión de reducir el número de asignaturas ofrecidas a los alumnos. Entre ellas figuran la enseñanza del idioma amárico, la informática, los deportes, la música y el arte.

«El 85% de las escuelas han sufrido daños parciales o totales como consecuencia de la guerra. Más de 22.500 profesores de la región llevan más de dos años sin cobrar. Millones de niños han abandonado la escuela»

El Programa Mundial de Alimentos ha suspendido la distribución de ayuda humanitaria «hasta nuevo aviso»

El Programa Mundial de Alimentos ha suspendido la distribución de ayuda humanitaria «hasta nuevo aviso», debido al descubrimiento de robos a gran escala de alimentos de socorro y su venta en los mercados locales.

Por el mismo motivo, la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) también ha suspendido la financiación de la ayuda. Según USAID, «las partes beligerantes acordaron hace años robar alimentos a través de una ‘red criminal’ creada a raíz del alto el fuego del pasado noviembre (véase Agencia Fides 03/11/2022).

Aunque han pasado seis meses desde el acuerdo de paz de Pretoria entre los gobiernos de Tigray y Etiopía (véase Agencia Fides 29/10/2022), las fuerzas eritreas y amhara siguen en la región y la violencia continúa.

¿Qué es lo que la Iglesia puede aportar a las personas enfermas?

Javier Vitoria: «La autoridad de Jesús consiste en su capacidad de vivir de acuerdo con lo que predica»

Javier Vitoria
Javier Vitoria Diócesis de Bilbao

«A Jesús le preocupaba muchísimo más el sufrimiento de los seres humanos que el pecado. Porque ahí donde hay sufrimiento, está en peligro la vida», señaló el ponente, quien también aseguró que «el sufrimiento, por sí solo, no siembra nada. Lo que siembra es la entrega y la confianza»

| Diócesis de Bilbao

(Bizkeliza.org).- Con motivo de la Pascua del Enfermo que se ha celebrado este domingo (VI de Pascua), ayer lunes, 15 de mayo, la iglesia de los Santos Juanes del Casco Viejo de Bilbao, acogió la charla del presbítero diocesano Javier Vitoria, titulada «Cautivados por su rostro, acompañamos para que les cunda la vida”.

Alrededor de 80 personas participaron ayer en la sesión organizada por el área de Salud de la Delegación diocesana de Caridad y Justicia, en la iglesia de los Santos Juanes del Casco ViejoLa responsable de salud, Laura Etxeberria, inauguró el acto, con un momento oracional, tras el que presentó al ponente, a quien agradeció su presencia «por querer compartir aquello que hace que cunda más la vida».

avier Vitoria, Laura Etxeberria y Manu Moreno, delegado diocesano de Caridad y Justicia

Destacamos a continuación algunas de las frases de Javier Vitoria, en su intervención de ayer en la iglesia de los Santos Juanes, que comenzó con el interrogante: ¿Qué es lo que la Iglesia puede aportar a las personas enfermas?

  1. El tema de la sanación está vinculado fundamentalmente a la vida de la Iglesia.
  2. No hay ninguna realidad humana de la que Dios esté ausente. Está presente, para ayudar a que la vida de más de sí.
  3. No es lo mismo asumir la muerte con esperanza que sin esperanza.
  4. Mis palabras no tendrían ningún valor, si no hubiera personas que hacéis la tarea que hacéis (en referencia a los y las agentes de Pastoral de la Salud).
  5. Es importante crear condiciones para poder enfermar sin que la vida se agote y se inhabilite.
  6. La autoridad de Jesús consiste en su capacidad de vivir de acuerdo con lo que predica, con lo que anuncia, ser coherente con su mensaje.
  7. A Jesús le preocupaba muchísimo más el sufrimiento de los seres humanos que el pecado. Porque ahí donde hay sufrimiento, está en peligro la vida.
  8. Jesús nos ofrece la esperanza en que puede haber vida antes de la muerte.
  9. El sufrimiento, por sí solo, no siembra nada. Lo que siembra es la entrega y la confianza.
  10. Una de las cosas que más me ha hecho sufrir en la vida es contemplar como mujeres «con juventud acumulada» se desesperaban cuando veían que tenían que ser cuidadas «si los hijos no te cuidan porque no eres útil, es que no te merecen».
  11. Desde que nacemos somos dependientes. No hay nadie independiente. Somos autónomos, pero interdependientes y el modelo de interdependencia cambia con los años.
  12. Tenemos que ser críticos. La Pastoral de la Salud tiene que ser incómoda. Caricia y aguijón a la vez.