Bienvenidos al capitalismo de escasez

Por José Castillo

La pandemia iba a ser algo pasajero, pero ha terminado suponiendo cambios trascendentales en nuestra cotidianidad; la crisis inflacionaria también iba a ser algo pasajero, vaticinaban los principales gurús económicos, pero ha provocado una desvalorización de los salarios sin parangón en las últimas décadas; finalmente, el periodo de ahorro o racionamiento energético también claman que será pasajero, pero ya no es tan fácil de creer. ¿Estamos ante un episodio pasajero provocado por la guerra de Ucrania o ante una gran mutación del modo de regulación en la gobernanza del sistema capitalista mundial?

Que el sistema-mundo capitalista está en una fase crítica de cambio y cronificación de la crisis económica es asumido por todas las grandes corporaciones del capital y sus instituciones gobernantes, el Foro Económico Mundial lleva hablando desde el inicio de la pandemia de covid19 de un plan de “Gran Reset” para reconstruir la economía mundial y dirigirla a un nuevo ciclo de acumulación. Este cambio de paradigma se enmarca como la finalización y profundización lógica a lo que podemos denominar, siguiendo las palabras del sociólogo Andrés Piqueras, como la Segunda Gran Crisis de Larga Duración del capitalismo que comenzó hacia 1973 y que encontró su salida temporal en el marco de regulación en el modelo financiarizado-neoliberal. El fin de este modelo puede estar llevándonos en la actualidad hacia otra Gran Mutación del modelo de acumulación-regulación capitalista.

Sin embargo, pese a los cantos de sirena que se lanzaron a comienzos de la pandemia augurando un nuevo modelo de “keynesianismo pandémico”, sobre todo desde ámbitos políticos progresistas, que se basaría en una suerte de vuelta al paradigma del Estado redistribuidor, la actual crisis inflacionaria y bélica demuestran que los derroteros de la gobernanza capitalista apuntan hacia un modelo de escasez marcado por la pobreza y proletarización crecientes. Todo esto junto al intento de control de la exclusión y sus problemas sociales vía políticas estatales de subsistencia mínima.

Es evidente que vivimos un periodo de transición hacia algo nuevo, y que a todos ojos no se parece en nada a los “felices años” posteriores a la Segunda Guerra Mundial

Tal y como plantea Giovanni Arrighi, uno de los autores más destacados del paradigma del sistema-mundo capitalista, cada vez que sucede una crisis por los excesos del capital financiero sobre el productivo, esta marca la señal de la decadencia de cierto modelo de crecimiento y de la potencia que se ha hecho hegemónica con el mismo. En esa fase nos encontramos, a una década del estallido del sistema financiero y con tensiones geopolíticas crecientes por el dominio mundial. Pese a no poder vislumbrar todas las características de esta nueva fase, es evidente que vivimos un periodo de transición hacia algo nuevo, y que a todos ojos no se parece en nada a los “felices años” posteriores a la Segunda Guerra Mundial.

Los cambios de fase capitalista

Como hemos mencionado, el capitalismo occidental lleva décadas en crisis, destacados economistas marxistas y heterodoxos hablan de una larga depresión al menos desde la década de 1970 hasta la actualidad. Y los datos estadísticos oficiales demuestran esta tesis; las tasas de reinversión y productividad no han hecho más que caer en las últimas décadas, pese a que se ha tratado de mantener viva la demanda agregada vía crédito fácil, burbuja que estalló con la crisis del 2008. Pero esta vez nos encontramos ante una nueva dimensión de la crisis, ya que el capitalismo se acerca a lo que podemos llamar sus límites biofísicos; por lo tanto, además de sus límites internos debe enfrentarse a los externos, a que los recursos del planeta que han asegurado su reproducción en el tiempo son finitos.

Arabía Saudí ha advertido de que ya ha llegado a su techo de producción de petróleo y que, pese a seguir siendo el principal productor de petróleo del mundo, no tendrá capacidad adicional para aumentar la producción por encima de los 13 millones de barriles por día que se comprometió a tener para 2027. El petróleo sigue siendo una pieza clave en todos los procesos productivos e imprescindible para todo el sistema de transportes. La crisis no es solo un bache puntual, sino que va a traer cambios que serán instaurados como temporales, pero vendrán para quedarse, como el del racionamiento de energía a todos los niveles.

Pero, además, el sistema capitalista arrastra la habitual contradicción entre el valor ficticio generado por el entramado financiero mundial y la plusvalía y valor real producido, lo que responde a un estancamiento de la tasa de ganancia que vuelve a caer en nuestros días. Muestra de ello es que la producción industrial global cayó un 2,7% en abril, tras haber caído un 1% en marzo. Concretamente, en Alemania, la principal potencia industrial europea, el componente de compras prospectivas e inventarios manufactureros medido por el índice PMI (Índice de Gestores de Compras, por sus siglas en inglés) ha caído en picado hasta los niveles de 2008, por lo que es probable que la fabricación alemana y la demanda industrial mundial ya estén en recesión.

El fin del ciclo financiarizado con centro en Estados Unidos lleva en declive más de una década, pero ninguna otra zona de la geografía del sistema-mundo capitalista muestra de momento el suficiente dinamismo como para poder arrastrar al sistema mundial en su conjunto a un nuevo ciclo de acumulación basado en la producción real de valor y ganancia. Además de que este nuevo ciclo se enfrentaría a los mencionados límites biofísicos. Ante este agotamiento de reservas energéticas y primarias vitales puede surgir un modo de regulación y gobernanza capitalista nuevo, con la guerra por los recursos como elemento de regulación a nivel externo y la imposición de medidas de racionamiento a la población a nivel interno. De todas maneras, el impacto y alcance de este nuevo modo de regulación capitalista tendría distintos efectos y formas en la periferia o en el centro del sistema.

Capitalismo de escasez en la periferia

Está claro que esta posible transición hacia un modelo de regulación capitalista donde la escasez y el racionamiento sean la norma social no afectará por igual a los países del llamado centro del sistema que a los de la periferia. Ya que en estos segundos la escasez material real ha sido la norma más que la excepción durante los siglos de modernización capitalista. Sin embargo, podemos decir que, en esta fase bélica de reconfiguración de las relaciones capitalistas globales, la llamada periferia de tardía industrialización se verá especialmente golpeada por las interrupciones en las cadenas de suministros de alimentos, pudiendo producirse hambrunas a gran escala como la que ya se vislumbra por el bloqueo del trigo ucraniano y la solución que han tenido que buscar las potencias globales para su desbloqueo provisional.

El trigo de Ucrania y Rusia se exporta principalmente a Oriente Medio y al norte de África. Por su parte, Rusia es el mayor exportador mundial de fertilizantes, con un 15% del suministro mundial. En la actualidad, de los 195 países del mundo, al menos 34 son incapaces de producir su propia comida debido a limitaciones de agua o de tierra, de estos 34 la mayoría se sitúan en la lista de los principales importadores alimenticios de Rusia y Ucrania, situados en la región del Norte de África y Oriente Medio. Entre estos países también hay claras diferencias, los países productores de petróleo del Golfo pueden acceder a otras vías de suministro de alimento gracias a sus divisas procedentes de los hidrocarburos, pero existen otros países africanos que no, ya que dependen de que el trigo ruso y ucraniano es más barato por su calidad proteica inferior respecto a otros exportadores de esta materia prima.

Por ejemplo, Egipto, que obtenía hasta ahora más del 85% de sus importaciones de trigo de la región del Mar Negro y necesitará encontrar proveedores alternativos, que serán más caros. Otros países de la región, como Yemen y Siria, están en una posición aún más grave a causa de su dependencia de las ayudas alimentarias, ya que el Programa Mundial de Alimentos (World Food Program) tiene también dificultades para aprovisionarse. En una época donde el índice de precios alimenticios ha llegado a récords históricos, la predicción del Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas es que 2022 será “un año de hambre catastrófica”.

Precisamente, los datos de la misma FAO ya alertan de que la inflación alimentaria mundial ha hecho subir de manera considerable y en el rango temporal de un solo año el porcentaje de personas en situación de inseguridad alimentaria, sobre todo en África, América Latina y el Caribe. En este contexto, los países más desfavorecidos ya han optado por una estrategia de proteccionismo alimentario. Uganda y Ghana han prohibido la exportación de granos y otros productos agrícolas. Este último país ha vivido una subida repentina del 27% de la inflación y numerosas protestas recorrieron las calles del país el mes de mayo por la situación de hambre que empezaba a expandirse.

Al problema del hambre se le une en la periferia global el de la deuda y la subida de tipos de interés generalizada, que dificultará la refinanciación de los Estados más débiles y mermará su capacidad importadora de alimentos y de otros bienes básicos. La quiebra de Sri Lanka puso de relieve que el problema de financiación de los países capitalistas es de máxima actualidad. Según una información publicada por el portal de noticias económicas Bloomberg, hay al menos 15 países con riesgo de incurrir en impago en los próximos meses, con una prima de riesgo por encima del 10% (>1000 bps), entre los que destacan países como Líbano, Bielorrusia, Ucrania o Túnez.

Las consecuencias de las turbulencias económicas globales son claras, más de 260 millones de personas adicionales podrían verse sumidas en la pobreza extrema este año 2022, según un reciente informe de la ONG Oxfam Intermón. Tal es la situación, que la clase capitalista ha comenzado a alertarse por las posibles consecuencias sociales de esta desigualdad creciente. Larry Flink, CEO de BlackRock, se ha pronunciado advirtiendo de que le preocupa mucho más la subida de los precios alimentarios que la de los de la gasolina u otros carburantes.

Capitalismo de escasez en el sistema central

En los países del centro del sistema-mundo capitalista, como en Europa, la situación no llegará hasta el extremo de una escasez tan generalizada, pero sí que se instaurará un nuevo régimen regulatorio en el que los precios altos de la energía y su racionalización de uso se instaurarán como realidades permanentes. Pese a la intervención que distintos gobiernos puedan realizar sobre la factura de la luz, la verdad es que el tiempo de la energía barata parece haber llegado a su fin. Por ejemplo, y pese a la relativa prontitud para un juicio absoluto, el tope al precio de la energía impuesto por el Gobierno de España ha rebajado la factura de la luz, pero según datos de Facua, la factura de junio de este año fue la tercera factura más cara de la historia: el usuario medio abonó 133,85 euros, un 65% más que hace un año.

En cuanto a la cantidad de gas real que acumula la Unión Europea actualmente, en total, los Estados miembros acumulan 597 TWh de gas (teravatios por hora) de los 1.100 TWh de capacidad total con la que cuenta la UE, una cantidad cercana al 55%. Para octubre la UE espera tener sus depósitos de gas al 90%. Para ello, y debido a que los gasoductos provenientes de Rusia están funcionando a capacidades bastante alejadas de sus máximos, la UE ha propuesto ya a sus Estados miembros un plan de ahorro energético, que ha comenzado a aplicarse en pleno verano, sin esperar al invierno.

El país que más va a sufrir es Alemania, ya que cuenta con la industria europea más dependiente del gas natural ruso, debido a su política de descarbonización y cierre de centrales nucleares y escasa sustitución por otras fuentes de energía

El objetivo es que entre familias y empresas se ahorren entre 45.000 millones y 30.000 millones de metros cúbicos de gas. Sin embargo, no es lo mismo el ahorro que puede realizar una familia al de una rama industrial totalmente dependiente del gas natural, como es el caso de los hornos de las fundiciones de algunas industrias. En este sentido, el país que más va a sufrir es Alemania, ya que cuenta con la industria europea más dependiente del gas natural ruso, debido a su política de descarbonización y cierre de centrales nucleares y escasa sustitución por otras fuentes de energía.

La Comisión Europea lo ha dejado claro, por ahora, este ahorro energético no responde directamente a ninguna política climática, el objetivo es amortiguar la situación de emergencia que supondría un parón en la industria alemana por la falta de energía y que supondría un “momento Lehman” de hundimiento para toda la economía europea. Por eso los Estados miembros ya están aplicando políticas de ahorro energético. Desde controlar las temperaturas de aires acondicionados y calefactores en lugares públicos, hasta recomendaciones de duchas más cortas o de mantener todos los electrodomésticos apagados en caso de no estar usándose. Las medidas son variopintas, pero sin duda está claro que este invierno va a ser más oscuro y frío de lo que los países occidentales estaban acostumbrados.

El alcance del racionamiento energético dependerá de dos factores: el primero, el clima, ya que un invierno duro y frío podría disparar la demanda de gas natural para calentar los hogares. El segundo factor es la demanda internacional de gas, si países con un gran consumo industrial como China recuperan su consumo prepandemia podemos encontrarnos en una situación donde el flujo de gas ruso se incremente hacia el sureste asiático en detrimento de Europa. De todas maneras, un corte total a Europa por parte de Rusia parece imposible, ya que supondría un gran desbarajuste en los ingresos gubernamentales rusos; dado que, hoy por hoy, los países europeos son los mayores clientes de gas ruso. Una situación que no puede revertirse en el corto plazo, debido a todas las infraestructuras que requeriría construir en poco tiempo.

En consecuencia, independientemente del alcance que finalmente tenga el racionamiento energético, lo que ya se puede vislumbrar es que de este invierno la clase obrera europea saldrá notablemente más empobrecida, ya que la mayoría de la población europea ha estado enfrentando durante todo el año 2022 unas cifras de inflación cercanas al 10%. Al contrario, como ejemplo paradigmático, según datos del ministerio de Trabajo español, los salarios subieron en el primer trimestre una media del 2,36%, lejos de las cifras que marcaba el IPC, siempre superior al 6%.

Por tanto, el relato del ahorro energético también tiene consecuencias psicosociales en el sentido de que gran parte de la población percibe que sus ahorros se han reducido, pero ahora existe un relato en pro del ahorro y de una vida más austera justificado por el escenario bélico. En este contexto, la tasa de ahorro de los hogares españoles ha entrado en negativo en el primer trimestre por primera vez en tres años, lo que presupone que los ahorros acumulados durante la pandemia no eran tan grandes como el relato oficial presuponía. El índice de confianza de los consumidores de la eurozona se ha hundido también hasta niveles mínimos desde el año 2012, en plena crisis del euro.

Este escenario de capitalismo de escasez va a tener repercusión en las legislaciones nacionales, que preparan un escenario de mayor castigo para controlar a una población más pauperizada. El Congreso de los Diputados español dio luz verde en junio a una reforma del Código Penal que prevé castigar con prisión pequeños hurtos en caso de reincidencia. Todo ello con el objetivo de estigmatizar a quienes más va a afectar este encarecimiento de la vida, como menciona el juez Ramiro García de Dios Ferreiro, por regla general, de 23 juicios señalados en el conjunto de los juzgados, 20 son exclusivamente de tentativa de hurto de productos de menos de 400 euros en comercios.

Otros Estados europeos preparan también un endurecimiento de su normativa legal en el ámbito laboral. Noruega, uno de los principales sustitutos exportadores de gas y petróleo en detrimento de Rusia, intervino el derecho a huelga de los trabajadores de la empresa estatal energética a finales de junio por el miedo de que las reclamaciones huelguísticas de los trabajadores por un alza salarial pudieran disminuir en un 13% el suministro de gas del país.

Conclusiones políticas

No es la primera vez en la historia del sistema capitalista mundial en la que coinciden una crisis energética y una crisis inflacionaria, ya que el mismo escenario se vivió en los años posteriores a la conocida crisis del petróleo de 1973. Sin embargo, en aquel entonces la economía capitalista mundial solamente comenzaba a vivir el largo declive que sufriría en las siguientes cinco décadas, con la concatenación incesable de crisis de mayor o menor medida solamente paliadas vía crédito y crecimiento artificial, al menos en el polo europeo-estadounidense. Ojo, que el escenario sea de escasez no quiere decir que las grandes empresas oligopólicas que gestionen esta escasez vayan a dejar de tener beneficios extra, ya que el precio al alza les favorece, como demuestran las cuentas de récord de las principales empresas energéticas.

Tras el shock pandémico, que ya introdujo nuevas modalidades en la regulación social, bajo el escenario bélico podemos avanzar a lo que todas luces se puede caracterizar como un capitalismo donde el consumo de energía y ciertos recursos será el primer objetivo social a regular

Además, al contrario que en la década de 1970, hoy no existe un movimiento obrero fuertemente organizado en la mayoría de países occidentales. Coincidiendo con la crisis inflacionaria de los años 70, la mayoría las patronales doblaron el brazo de la clase obrera organizada imponiendo pactos de rentas muy por debajo de la inflación, al estilo de los Pactos de la Moncloa. Sin embargo, lo que en el contexto actual destaca es la existencia de una amplia capa de población excluida temporal o permanentemente de los circuitos del trabajo asalariado, lo que la hace todavía más dependiente de las ayudas estatales de subsistencia mínima que se le puedan ofrecer. Tras el shock pandémico, que ya introdujo nuevas modalidades en la regulación social, bajo el escenario bélico podemos avanzar a lo que todas luces se puede caracterizar como un capitalismo donde el consumo de energía y ciertos recursos será el primer objetivo social a regular. Bienvenidos al capitalismo de escasez.

José CastilloEs investigador doctoral en el departamento de Geografía Política de la Universidad Complutense de Madrid.

Fuente: https://www.elsaltodiario.com/opinion/bienvenidos-al-capitalismo-de-escasez

Francisco, un Papa discutido


ALGUNOS “CATÓLICOS PRACTICANTES” CALIFICAN AL PAPA DE COMUNISTA Y DE REPRESENTANTE DEL DIABLO EN LA TIERRA»

El director de La Razón y católico practicante reconocido, Francisco Marhuenda, calificaba al pontífice de «Un Papa antiespañol», mostrándose convencido de que, en el cónclave que lo eligió, «el Espíritu Santo se confundió, y los cardenales eligieron un candidato catastrófico»

 Eduardo Inda, fue, incluso, un paso más allá: «Este Papa comunista es el anti-Papa, el representante del diablo en la Tierra»

 Estos señores que presumen de católicos ignoran que la Biblia condena el trabajo que no es honrado o que perjudica a otras personas de algún modo (Levítico 19:11,13; Romanos 13:10). Ser un buen trabajador beneficia a otras personas y permite tener “una buena conciencia” (1 Pedro 3:16).

 Un país que quiere edificarse en la mentira y la corrupción está abocado al fracaso total. El crecimiento debe basarse en el trabajo honrado, la formación, dar oportunidad a los jóvenes… Regresar, en definitiva, a las raíces y los valores.  La cultura del sacrificio y ganarse el pan cada día con el esfuerzo tiene que volver.

Los mecanismos del Estado Capitalista buscan evitar a toda costa que se exprese la voluntad de las mayorías y que decida siempre la clase explotadora.

Díaz y el Papa comparten una visión bastante cercana sobre el mundo del trabajo y la economía. De hecho, en la encíclica Fratelli Tutti pueden leerse algunos pasajes aplicables al modo de entender el empleo de la ministra de Trabajo. Francisco se ha interesado también por la situación en la que se encuentra la reforma laboral en España —el entorno de Díaz señaló tras la reunión que “está muy avanzada”—,

Para Weber la existencia del capitalismo representa el conducto de decisiones de la actividad de los seres humanos. La lucha por ser mejor, no por la existencia misma, sino por obtener más, es lo que origina la competencia. Por esta competencia de conseguir más, se deriva en lucha de seres humanos: “El cálculo de capital en su estructura formalmente más perfecta supone, por eso, la lucha de los hombres unos contra otros”

Según  Weber, entonces, en el capitalismo económico racional, no hay lugar para la moralidad caritativa ya que el ser humano caritativo no es un ser humano competitivo, y porque el ser humano competitivo es el principal agente en la gestión económica. En este escenario, es claro que el altruismo tampoco tiene espacio en el racionalismo económico del capitalismo moderno.

Para Weber, la particulares normas del capitalismo son rígidas y sin posibilidad de excepciones. En la idea del capitalismo racional que explica Weber, no hay lugar para posturas humanistas. Esta falta de posturas humanistas hace que se llegue, las más de las veces, a posturas irracionales donde el ser humano termina siendo solo una pieza tecnificada y sin humanidad (cual cosa), cuya utilidad se limita a la consecución de mayor riqueza para la gran máquina capitalista económicamente racional: (Weber, Economía y sociedad…) “(…) el capitalismo (…) lo que necesita es un derecho con el que se pueda contar lo mismo que con una maquina (…) La creación de semejante derecho se consiguió al aliarse el Estado moderno a los juristas, para imponer sus ambiciones de poder.

Weber se interesó por estos efectos sobre los individuos, los «engranajes de la máquina». El capitalismo, que había prometido una utopía tecnológica centrada en el individuo, había creado en su lugar una sociedad dominada por el trabajo y el dinero, supervisada por una burocracia inflexible. Esta sociedad rígida no solo oprime al individuo, sino que lo deshumaniza, al hacer que se sienta a merced de un sistema lógico, pero sin alma.

Devolver a la persona al centro de la vida económica y social es la mejor vacuna contra el economicismo imperante, contra los diferentes populismos o el neoliberalismo individualista e ingenuo que pone toda su confianza en la autorregulación del mercado.

  Afirma el papa Francisco  (FRATELLI TUTTI) “Destrozar la autoestima de alguien es una manera fácil de dominarlo. Detrás de estas tendencias que buscan homogeneizar el mundo, afloran intereses de poder que se benefician del bajo aprecio de sí, al tiempo que, a través de los medios y de las redes se intenta crear una nueva cultura al servicio de los más poderosos.”

El mensaje del papa Francisco es un toque de atención a las conciencias de los habitantes de los países donde llegan los inmigrantes.

El papa invita a reflexionar cuando pregunta: «¿No es tal vez el deseo de cada uno de ellos el de mejorar las propias condiciones de vida y el de obtener un honesto y legítimo bienestar para compartir con las personas que aman?”

Francisco explica que para los católicos «en la acogida del extranjero (…) se abren las puertas a Dios y en el rostro del otro se manifiestan los rasgos de Jesucristo».

Hoy en día es esclavo el hombre que está atado por su propia libertad cuando no sabe para qué le sirve. Porque la libertad no es un valor en sí, sino un valor en el que debe construirse la propia persona. Decía Goethe: “nadie  es más esclavo que quien se considera libre sin serlo”. Y no hay servidumbre más vergonzosa que la voluntaria.

Hay algunas personas que piensan que lo importante es cuánto dinero se gana. Esa manera de pensar, junto con el deseo de ganar dinero rápido, ha hecho que algunas personas se metan en negocios sucios o hasta participen en actividades ilegales.

La pandemia de COVID-19 y las medidas para controlar la transmisión del virus interrumpió abruptamente el movimiento de personas que caracteriza a nuestro mundo interconectado. Las consecuencias son enormes para los migrantes, que dependen del trabajo lejos de sus hogares para mantenerse a sí mismos, sus familias y sus comunidades. Muchos de ellos se encuentran ahora en condiciones que los ponen en mayor riesgo de contraer la COVID-19. Con esta crisis, se ha desatado la «globalización de la indiferencia» y a veces de la violencia, con un odio contra los más vulnerables, contra los migrantes, contra las poblaciones discriminadas y, muy a menudo, contra las mujeres.

Los valores de nuestro mundo actual nos han ido colonizando y los hemos ido asumiendo, hasta el punto de considerarlos propios y hegemónicos de la humanidad. El resultado de todo esto ha sido una generación de ciudadanos acríticos, poco reflexivos, dóciles consumidores, competitivos y trabajadores tecnócrata

¡Cambiemos este sistema de muerte!

“¡Cambiemos este sistema de muerte!”, Papa Francisco 

Por Pedro Pierre 

Ya son años que el papa Francisco desvela la perversidad del sistema capitalista, como ningún papa antes de él. Además nos dice que quiénes son los que tienen más capacidad de cambiarlo son las Organizaciones sociales. Eso fue su discurso en 2015 en Santa Cruz de Bolivia. Acaba de repetirlo en un mensaje a los mismas Organizaciones Sociales hace unos pocos días. Pero nosotros, ¿estamos convencidos que este sistema que nos organiza la vida diaria es perverso? Tal vez ahora con el actual gobierno empezamos a preguntarnos por qué motivos estamos en un caos que beneficia a los 1% de ricos y perjudica a los demás 99%. 

Ya el papa Juan Pablo 2° lo decía hace más de 40 años: Se trata de un sistema que produce “ricos cada vez más ricos a costa de pobres cada vez más pobres”. Repetía lo que los obispos latinoamericanos habían escrito unos 10 años antes en el Documento de Conclusión de su reunión latinoamericana en Medellín (Colombia, 1968): Los pobres son “empobrecidos” por un sistema que explota sin límite tanto a los seres humanos como a la naturaleza. El problema no es la pobreza, sino la riqueza, es decir la acumulación de bienes en cada vez pocas manos que despojan a los demás. Por estas razones el papa Francisco insiste en un cambio de este sistema que nos lleva a la muerte. 

Pero, ¿creemos que no hay problemas que no podamos superar?… porque una cosa es estar convencido que estamos en un sistema de muerte y otra que tengamos la seguridad que podemos sustituirlo. La fuerza del capitalismo reside en nuestra complicidad con él: Nosotros mismos somos su sustento, porque escuchamos y obedecemos lo que nos dicen los medios de comunicación nacionales e internacionales de manera muy sutil y permanente: “¡El dinero lo resuelve todo!” 

Es la gran mentira por la que nos desgastamos la vida inútilmente porque así no vamos a lograr resolver nuestros problemas. O nos dicen: “¡Los que trabajan tienen éxito!” Otra mentira: tal vez lo estemos entendiendo mejor con el presidente que nos gobierno. El se ha hecho rico con el dinero que le hemos confiado libre, voluntaria y generosamente. 

Analicemos la gestión de los bancos. ¿A quiénes pertenece el dinero de los bancos? A los ecuatorianos, ¿no es cierto? Nosotros le confiamos nuestro dinero y ellos lo hacen ‘trabajar’. Nos cobran un montón de tasas por los servicios que nos prestan. ¿Se han puesto a pensar cuánto ganan por ejemplo con las planillas de planillas de luz, agua, teléfono, internet cada mes, a 50 centavos cada una? Ya pagamos 2 dólares mensualmente. Si en Ecuador hay 4 millones de familias que tienen una casa o un departamento, cada mes pagamos 8 millones de dólares a los bancos. Al año, ¡96 millones! ¿Quién se da cuenta? ¿Quién protesta 

Otro ejemplo de los mismos bancos. Cuando depositamos dinero al banco, nos dan un interés -los economistas serán más precisos- de 4% mensual. Pero si prestamos dinero al mismo banco, ¿cuánto tenemos que pagar mensualmente? de 10 a 30% según la compra que queremos hacer. Por eso: más dinero depositamos, más ganan los banqueros y todavía mucho más ganan si les prestamos dinero… ¿Cuándo no rinden cuentas? Nunca. Y cuando tienen mucho dinero que han ganado con nuestro dinero, lo depositan en lo paraísos fiscales o lo que es todavía más seguro y rentable en los bancos norteamericanos. ¿Quién protesta por esta ‘espectacular’ ganancia de los bancos con nuestro dinero? … ¿Está claro o no? ¡Somos los grandes cómplices de estas ‘fabulosas’ situaciones! 

¿Qué tenemos que hacer para cambiar esto? Lo primero es darnos cuenta que un sistema nos organiza toda la vida, y este sistema es el capitalismo. Luego deberíamos informarnos más de cómo funciona. Eso es simple: en 1848 (¿han leído bien? 1848, hace 173 años), un tal Karl Marx lo describió de una manera muy sencilla en un pequeño fascículo llamado “Manifiesto del partido comunista”, porque este señor fue el primero en desentrañar la perversidad del capitalismo. 

Es por esta razón que nos han hecho creer que ¡Karl Marx era peor que el diablo! 
Y si Karl Marx le da algún recelo, lean “los padres de la Iglesia” (de los primeros siglos de nuestra era cristiana) cuando hablan del dinero. Un “botón para muestra”: “¡El rico es rico por ladrón o por ser hijo de ladrón!” Desde más de un siglo los papas nos describen esta perversidad del capitalismo y han constituido la así “La Doctrina Social de la Iglesia”… Pero, ¿cuántos católicos saben que existe tal Doctrina Social? Y ¿por qué motivos no se habla de ella en las clases de catecismo o desde el púlpito? 

Tal vez sea por eso, por tanta ignorancia católica que nos sorprendemos de lo que dice, perdón, de lo que repite el papa Francisco. O también puede ser porque preferimos olvidar lo que dice el mismo Jesús sobre la riqueza y el dinero que tanto anhelamos: “¡Malditos, ustedes los ricos, porque ya tienen su recompensa!” “¡Es más fácil para un camello pasar por el ojo de una aguja que un rico entrar en el Reino de Dios!” Entonces, ¿qué hacer con nuestro dinero? También lo dijo el mismo Jesús: “¡Con ese maldito dinero háganse amigos!” ¿Entendido? 

Así comienzan los cambios en nuestras vidas: Hacernos amigos para aprender a vivir y vivir plenamente… Así también se aprende a conocer la perversidad del sistema capitalistas del cual somos los mejores cómplices y encubridores. Así también comprenderemos las invitaciones del papa Francisco: “¡Cambien este sistema de muerte!” Así pasaremos a estar seguro que “¡el cambio comienza conmigo! 

Los obispos españoles ¿al lado del liberalismo que mata?

Los teólogos progresistas acusan a los obispos españoles de “colocarse al lado del neoliberalismo que mata” 

  • El congreso del principal grupo de teólogos progresistas denuncia «la violencia de género, ejercida por las jerarquías religiosas, nuestro caso por la jerarquía católica, que niega a las mujeres el reconocimiento de sujetos morales, eclesiales, teológicos y sus derechos sexuales y reproductivos” 

Imagen de una asamblea de la conferencia Episcopal.Imagen de una asamblea de la conferencia Episcopal. 

Jesús Bastante 

en religiondigital.com —5 de septiembre de 2021 12:46h 

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@BastanteJesus 

“Con la apropiación de decenas de miles de bienes a través de las inmatriculaciones, la jerarquía de la Iglesia católica española contraviene el mandato de Jesús de no acumular tesoros en la tierra, hace oídos sordos a la petición de que devuelva dichos bienes al pueblo y se coloca del lado del neoliberalismo que mata”. Con este duro mensaje concluye el 40 Congreso de la Asociación de Teólogos y Teólogas ‘Juan XXIII’, el principal grupo de teólogos progresistas españoles, que desde 1981 reivindican una Iglesia más apegada a los pobres y el fin del patriarcado en la institución. 

En su 40 aniversario, celebrado on line por la pandemia, los teólogos denuncian “la defensa y mantenimiento de los privilegios económicos, fiscales, educativos, culturales e incluso militares” de la Iglesia católica en España, a la que acusa de “apropiarse de una cuantiosa suma de dinero (301,7 millones de euros este año) que debería destinarse a fines sociales” y que, a través de la casilla de la ‘X’, va a parar a las arcas episcopales. 

Durante el simposio, bajo el lema ‘El neoliberalismo mata: no se puede servir a Dios y al dinero’, han participado, entre otros, el arzobispo emérito de Tánger, Santiago Agrelo; los teólogos Frei Betto y José Arregi; o las teólogas Ana de Miguel y Nivia Núñez de la Paz. A lo largo del fin de semana, se han analizado “las situaciones de injusticia estructural, pobreza extrema, desigualdades crecientes, violencia de género, discursos y prácticas de odio contra personas inmigrantes, refugiada y desplazadas. LGTBI y deterioro del planeta”, así como “las guerras, la pandemia y la devastación ambiental”, que han aumentado en 250 millones la inseguridad alimentaria. 

“El coronavirus, que ha provocado el contagio de doscientos millones de personas y la muerte de más de cuatro millones, ha afectado con más virulencia a los sectores más vulnerables de la sociedad. A su vez, nos ha hecho tomar conciencia de nuestra fragilidad y vulnerabilidad y de la necesidad de practicar la ética del cuidado”, señala el comunicado final, que dirige una mirada “conmovida e indignada” ante el sufrimiento del pueblo afgano, la pobreza extrema en Haití o “la desatención de los niños marroquíes en Ceuta y su utilización política, por las personas inmigrantes pobres ahogadas y por la violencia contra el pueblo palestino y otros pueblos oprimidos”. 

Iglesia, neoliberalismo y patriarcado 

“Hemos tomado conciencia de que las fronteras matan, la información, cuando es utilizada al servicio del poder y contra los pobres, mata y el silencio también mata”, clama el manifiesto final, que ataca con dureza “el neoliberalismo económico, en alianza con el patriarcado” que “se convierte en neoliberalismo sexual”. “Sexo y mercado están deviniendo más compañeros que nunca”, recalca el comunicado final, que pone de manifiesto “la alianza entre el neoliberalismo económico, el fundamentalismo y el patriarcado religioso, por su utilización mercantil de las mujeres”. 

Una discriminación que deviene en violencia de género, “ejercida por las jerarquías religiosas, nuestro caso por la jerarquía católica, que niega a las mujeres el reconocimiento de sujetos morales, eclesiales, teológicos y sus derechos sexuales y reproductivos”. 

Así, lamentan los teólogos, la Iglesia católica mantiene “una ética represiva, que impone a las mujeres una moral de esclavas, y la estructura jerárquico-patriarcal, que las excluye de los ámbitos de decisión”. 

Cristianismo frente al capitalismo neoliberal

Por Fernando Bermúdez
Hace muchos años, en 1976, durante una charla que impartí en el aula de cultura de Palomeras Altas, en Vallecas, presenté un cartel con el siguiente texto:
“En un lugar muy lejano había una comunidad
que tenía un solo corazón y una sola alma.
Sus miembros compartían todo lo que tenían,
se repartía los bienes de acuerdo a lo que cada uno de ellos necesitaba.
Nadie consideraba suyo lo que poseía,
sino que todo lo tenían en común.
No había entre ellos ningún pobre,
porque se repartía a cada uno según sus necesidades”.
Después pregunté: ¿de quién es este texto?
Uno respondió: Pienso que es del libro la Utopía de Thomas Moro.
Yo creo –dijo una mujer-, que ese texto debe ser de una comunidad hippie.
Seguí preguntando y uno expresó que le suena al manifiesto comunista de Carlos Marx, donde se dice que “de cada quién según su capacidad y a cada quién según su necesidad”.
Y así fui escuchando diversas opiniones.
Finalmente, abrí la Biblia y leí los capítulos 2 y 4 de los Hechos de los Apóstoles (2, 44-45 y 4,32-37). Todos quedaron sorprendidos al comprobar que este texto es de la Biblia, donde describe el estilo de vida de los seguidores de Jesús cuando formaron la primera comunidad en Jerusalén.
Hoy haría lo mismo con aquellas personas que se confiesan muy católicas y sin embargo, defienden la libertad absoluta de libre mercado, la propiedad privada sin control y se oponen a la acogida de inmigrantes. A todas ellas les recuerdo que:
Jesús habló muy claro. Su mensaje y su práctica fueron revolucionarios. Dijo que el proyecto de Dios es que todos los hombres y mujeres, sin discriminación, vivamos como hermanos, compartiendo lo que somos y tenemos. Y puso este ejemplo: había una vez un hombre rico que se condenó porque no compartió con el pobre Lázaro. Ese hombre no se condenó por ser rico sino por no compartir su riqueza con los pobres (Lc 16, 19-31). Seguir leyendo

Colombia en llamas

El fin del neoliberalismo será violento

BOAVENTURA DE SOUSA SANTOS

Participantes en una representación artística y simbólica en el Parque de los Deseos, durante una nueva jornada de protestas en el marco del Paro Nacional, en Medellín (Colombia).- EFE / Luis Eduardo Noriega A.

 

Colombia está en llamas. Actualmente es uno de los países con más muertos por covid-19, ocupando el cuarto lugar en la región después de Estados Unidos, Brasil y México, teniendo hasta la fecha tan solo el 3,5% de la población totalmente vacunada y siendo parte de los países que se niegan a apoyar la solicitud de liberación de las patentes de las vacunas. Es también el país que en 2020 tenía el 42,5% de su población en condición de pobreza monetaria y el 15,1% de la misma en condición de pobreza monetaria extrema. A estos datos mínimos pero significativos le podemos sumar que, tras la firma del acuerdo de paz de 2016, se han asesinado entre 700 y 1.100 personas defensores y defensoras de derechos humanos (las cifras varían entre las ONG y las instituciones gubernamentales).

Las zonas que antiguamente fueron de dominio de las FARC-EP hoy están en disputa por parte de distintos grupos armados ilegales, los cuales no solo buscan intereses económicos (narcotráfico, minería ilegal) sino que también traen consigo un horrible y sangriento interés por el control sobre la población civil, afectando gravemente el tejido social y dando como resultado que esto es sólo la punta del iceberg del nuevo panorama que atraviesa el país.

Es en este contexto, y tras casi tres años bajo el gobierno de una derecha opositora al acuerdo de paz en medio de una pandemia que ha matado a miles de personas, en el que pueblo trabajador ha salido a las calles a levantar su voz en contra de una anunciada reforma tributaria que buscó, bajo la lógica del Gobierno, recaudar 23 billones de pesos (algo cercano a 6.300 millones de dólares) para mejorar las finanzas públicas y financiar los programas de asistencia social. Si bien es cierto que el país necesita mejorar su sistema tributario, esta reforma planteaba aumentar el número de personas que declaran y pagan impuestos sobre la renta con el aval, la visión y el marco conceptual del Fondo Monetario Internacional (FMI).

Plantear la idea de que más personas sean las encargadas de tributar y financiar los gastos del Estado, en teoría, no suena descabellado, es más, llevaría a pensar que serían las personas de altos ingresos quienes más pagarían impuestos teniendo en cuenta los principios de progresividad, equidad y eficiencia tributaria consagrados en la Constitución Política de Colombia. Pero, según los datos del Banco Mundial, Colombia es uno de los países más desiguales de América Latina (el índice GINI es de 51,3), reflejando una política fiscal inadecuada y regresiva que posibilita una alta concentración del ingreso y la riqueza, y ocasiona por ello un menor desarrollo, dado que los ingresos y la riqueza se quedan en manos de un porcentaje muy pequeño de la población. La reforma planteada, se uniría al largo y complejo sistema tributario del país que no refleja una verdadera política progresiva y que está lleno de beneficios tributarios dirigidos a las personas con mayores ingresos.

Podríamos afirmar que a partir de 2016 el pueblo trabajador ha inundado las calles y plazas de Colombia exigiendo la defensa de la paz y el cumplimiento de los acuerdos, la protección de los líderes sociales y la solidaridad con quienes han sido asesinados, así como el rechazo a propuestas de modificación de los regímenes pensionales, laborales y tributarios. Así, en los últimos cinco años Colombia ha visto sus calles recorridas por jóvenes, mujeres, indígenas, afros, docentes, pensionados y estudiantes que han generado hechos insólitos como una de las mayores manifestaciones en el país desde la década de 1970, como lo fue la llevada a cabo el 21 de noviembre de 2019 (21N).

Gracias a este empoderamiento popular, y a pesar de la pandemia de la covid-19, Colombia volvió a marchar del 9 al 21 de septiembre de 2020 para protestar en contra del abuso policial, del mal manejo del Gobierno ante la crisis económica y social provocada por la pandemia y para sentar una voz que dijera basta ya a las masacres en el país, las cuales no tuvieron tregua a pesar de las medidas de confinamiento. En especial hay que subrayar la Minga (movilización indígena) del suroccidente colombiano, ocurrida en octubre de 2020 liderada por las organizaciones indígenas, que emocionó por sus consignas y valentía y que logró movilizar a una gran parte de la sociedad en torno a sus exigencias tras su recorrido por el país, logrando la opinión favorable de millones de personas que los recibieron calurosamente en cada ciudad durante su viaje hasta la capital.

Bajo este panorama el pueblo decidió a partir del 28 de abril (28A) de 2021 marchar en contra de la reforma tributaria y del gobierno indolente. La represión de las fuerzas policiales es brutal. El malestar ciudadano ha sido objeto de estigmatización y represión por parte de la fuerza pública, lo que ha llevado a que distintas organizaciones de derechos humanos registren entre el 28 de abril y el 5 de mayo un total de 1.708 casos de violencia policial, 381 víctimas de violencia física por parte de la Policía, 31 muertes (en proceso de verificación), 1.180 detenciones arbitrarias en contra de los manifestantes, 239 intervenciones violentas por parte de la fuerza pública, 31 víctimas de agresión en sus ojos, 110 casos de disparos de armas de fuego por parte de la Policía y 10 víctimas de violencia sexual por parte de fuerza pública. De igual manera, la Defensoría del Pueblo (la figura del ombudsman en Colombia) señaló que se registraron 87 quejas por presuntas desapariciones durante las protestas del Paro Nacional del 28A.

Lo que empezó como una fuerte oposición a una reforma impopular y a un ministro de Hacienda que desconocía el valor de una docena de huevos (y en general de toda la cesta de la compra familiar), ha escalado al punto de no solo lograr que se retire dicha reforma en el Congreso y que dicho ministro renuncie, sino que el presidente de la República, Iván Duque Márquez, ha propuesto un espacio de diálogo con distintos sectores de la sociedad civil, diálogo que hasta el momento parece ser solo entre las élites del país, desde arriba, y nunca desde abajo. Las organizaciones sociales saben por experiencia que de este Gobierno nada bueno hay que esperar, pero como siempre lo han hecho no se rehúsan al diálogo. La primera victoria del movimiento ciudadano en las calles sobre la retirada de la reforma no llegó pacífica o gratuitamente. Además de las cifras antes mencionadas y recolectadas por las ONG del país, el presidente Duque anunció la militarización de Colombia antes de ceder al clamor social. A partir del 1 de mayo, las redes sociales y las calles colombianas han visto el horror de un despliegue militar típico de un estado de excepción dictatorial, con la Policía disparando en contra de manifestantes pacíficos y desarmados. Esta ha sido quizás la respuesta más violentamente represiva en tiempos de pandemia a nivel mundial.

Particularmente en Cali las protestas tuvieron una intensidad muy especial debido a la movilización de las organizaciones indígenas después del cruel asesinato de Sandra Liliana Peña, gobernadora indígena de apenas 35 años que proponía la recuperación de los conocimientos tradicionales y rechazaba la presencia de todos los actores armados en su territorio. Esta ciudad es el segundo centro urbano más negro de América del Sur, llena de contradicciones y luchas, y que ha visto cómo reprimen a su pueblo de la forma más aberrante posible. La situación es tal que, en medio de una reunión pacífica y retransmitida en directo por las redes sociales, se puede observar al escuadrón antidisturbios haciendo presencia para dispersar la manifestación, causando la muerte de un joven frente a más de 1.000 espectadores que observaban a través de internet. Desde Siloé, una comuna (favela) de Cali, se denunció también que durante la noche del 4 de mayo no se pudo acceder al servicio de internet en la zona.

La débil respuesta a la violencia policial por parte de las instituciones colombianas (tanto administrativas como judiciales) ha dado lugar a que civiles armados amenacen (y en ocasiones disparen) a los manifestantes bajo la idea de que son «vándalos» y «terroristas». En Cali, los estudiantes hicieron circular el siguiente «diálogo»: «Tenemos 25.000 armas», gritaba un hombre vestido de blanco desde su costosa camioneta aparcada frente a la Universidad del Valle (Univalle). «Nosotros tenemos una de las mejores bibliotecas del país», le contestó un estudiante. En Pereira, el alcalde promovía un «frente común» que incluyera a miembros de la seguridad privada, al Ejército y a la Policía para «recuperar el orden y la seguridad ciudadana», dando lugar a que un joven resultara herido con ocho balas y esté agonizando en un hospital de dicha ciudad.

¿Para dónde va Colombia?

Esta pregunta es importante para Colombia, pero más allá de Colombia me parece ver en los recientes acontecimientos el embrión de mucho de lo que pasará en el continente y en el mundo en las próximas décadas. Claro que cada país tiene una especificidad propia, pero lo que pasa en Colombia parece anunciar el peor de los escenarios que identifiqué en mi reciente libro sobre el periodo postpandemia (El futuro comienza ahora: de la pandemia a la utopía. Madrid: Akal. 2021). Este escenario consiste en la negación de la gravedad de la pandemia, la política de sobreponer la economía a la protección de la vida, y la obsesión ideológico-política de volver a la normalidad aun cuando la normalidad es el infierno para la gran mayoría de la población.

Las consecuencias de la pandemia no pueden ser mágicamente frenadas por la ideología de los gobiernos conservadores; la crisis social y económica pospandémica será gravísima, sobre todo porque se acumula con las crisis que preexistían a la pandemia. Será por eso mucho más grave.  Las políticas de ayuda de emergencia, por deficientes que sean, combinadas con el ablandamiento económico causado por la pandemia, van a causar un enorme endeudamiento del Estado, y el agravamiento de la deuda será una causa adicional para más y más austeridad. Los gobiernos conservadores no conocen otro medio de lidiar con las protestas pacíficas del pueblo trabajador en contra de la injusticia social que no sea la violencia represiva. Así van a responder y el mensaje va a incluir la militarización creciente de la vida cotidiana. Lo que implica el uso de fuerza letal que fue diseñada para enemigos externos. La degradación de la democracia, ya bastante evidente, se profundizará todavía más. ¿Hasta qué punto el mínimo democrático que todavía existe colapsará dando lugar a nuevos regímenes dictatoriales?

Este escenario no es especulación irrealista. Un reciente informe del FMI hace la misma previsión. Dicen los autores Philip Barrett y Sophia Chen* que las pandemias pueden tener dos tipos de efectos sobre la agitación social: un efecto atenuante, suprimiendo la posibilidad de causar disturbios al interferir en las actividades sociales, así como un efecto contrario que aumente la probabilidad de malestar social y por consiguiente se generen disturbios o protestas en la medida en que la pandemia se desvanezca. Lo que no dicen es que las protestas serán motivadas por las mismas políticas que el FMI y las agencias financieras promueven en todo el mundo. Es tanta la hipocresía del mundo en el que vivimos, que el FMI ignora u oculta las consecuencias de sus lineamientos. El pueblo colombiano merece y necesita de toda la solidaridad internacional. No estoy seguro de si la tendrán abiertamente de las agencias internacionales que dicen promover los derechos humanos, a pesar de que estos estén siendo violados tan gravemente en Colombia. Imaginemos por un momento que lo que está pasando en Colombia estuviese ocurriendo en Caracas, Rusia o cualquier otra parte del mundo declarado como no amigo de los Estados Unidos. Seguramente la Organización de Estados Americanos (OEA), el alto comisariado de la ONU y el Gobierno estadounidense ya estarían denunciando los abusos y proponiendo sanciones a los gobiernos infractores. ¿Por qué la suavidad en los comunicados emitidos hasta la fecha?

No se le puede escapar a nadie que Colombia es el mejor aliado de los Estados Unidos en América Latina, siendo el país que se ofreció para instalar siete bases militares estadounidenses en su territorio (situación que afortunadamente no ocurrió por intervención de la Corte Constitucional). Las relaciones internacionales en el presente viven el momento más escandaloso de hipocresía y parcialidad: solamente los enemigos de los intereses norteamericanos cometen violaciones de los derechos humanos. No es nuevo, pero ahora es más chocante. Las agencias multilaterales se rinden a esta hipocresía y parcialidad sin ningún tipo de vergüenza. Los colombianos, eso sí, pueden esperar la solidaridad de todos los demócratas del mundo. En su valentía y en nuestra solidaridad reside la esperanza. El neoliberalismo no muere sin matar, pero cuanto más mata más muere. Lo que está pasando en Colombia no es un problema colombiano, es un problema nuestro, de las y los demócratas del mundo.

Por el momento, las manifestaciones en Colombia no se ven próximas a finalizar y pese a que solo ha pasado una semana desde el inicio de las mismas, debemos insistir en superar el miedo que ronda las calles del país y en la esperanza de un futuro prometedor, más justo y en paz, para un país que ha querido terminar un conflicto de más de cincuenta años a través de un Acuerdo que agoniza bajo las garras del capitalismo abisal.

Social repercussions of Pandemics. IMF Working Paper. 2021

CEBs: ¡Juntos resistir y crear alternativas!

Nuestro compromiso de CEBS frente al sistema neoliberal

Pedro Pierre

Introducción: Visión latinoamericana y continental
1. La 1ª vuelta de las elecciones de 2021: ¡Todos contra uno!
2. La 2ª vuelta de las elecciones de 2021: Mentiras y engaños
3. Las astucias de los capitalistas y la ingenuidad de los ecuatorianos
4. Consecuencias regionales y continentales
5. Características del gobierno de Guillermo Lasso
6. Las CEBs: Solidaridad y alternativas
7. La fuerza de nuestra fe está en nuestras Comunidades
Anexo: Características del gobierno de Lenin Moreno

CEBs La Troncal, Pedro Pierre. Abril de 2021.

INTRODUCCIÓN: Tener un visión latinoamericana y continental

No podemos entender lo que está pasando en Ecuador con la elección de Guillermo Lasso si no nos ubicamos en la realidad latinoamericana y la injerencia efectiva de EE.UU. Vamos por pasos.

A. LA 1ª VUELTA DE LAS ELECCIONES DE FEBRERO 2021: ¡Todos contra uno!
1. “¡Todos contra Andrés Arauz!”
• Fue el lema de la derecha, apoyada por la embajada norteamericana.
• Los Medios de Comunicación logran desprestigiar a los correístas y a su gobierno progresista.
• Se lanzó las peores mentiras y las falsas promesas para engañar a los ecuatorianos.

• Los 36% de Andrés Arauz es un triunfo de la Revolución Ciudadana y de los ecuatorianos más conscientes.
2. Los resultados confirman el derrumbe de la unión de las derechas (CREO-PSC): Sólo 20% de votación.
3. El gran número de candidatos (16 listas) servía para confundir a los votantes y dispersar los votos.
4. La división de las directivas de la CONAIE y Pachakutik y de ellas con sus bases fue programada por la misma derecha, que compró poco a poco para su causa a sus dirigentes, mediante los proyectos de las ONGs.
5. Gracias al apoyo de los Medios de Comunicación comerciales, el candidato de la Izquierda Democrática, Xavier Hervas, logró captar al voto de los jóvenes, ayudado por sus mensajes en las redes sociales.
6. La Asamblea legislativa (137 asambleístas) puede ser un espacio de resistencia al neoliberalismo, si sus miembros y sus naturales opositores no se venden.

• Opositores al Neoliberalismo: Revolución Ciudadana: 51. Pachakutik: 26. Izquierda Democrática: 17. Total: 94.
• Los Neoliberales: PSC: 18. CREO: 12. Total: 30.
• El resto, o sea, los “independientes” obedecerán a sus intereses y al “hombre del maletín”: Total: 14.
• En la Asamblea, si Pachakutik (26) se une al PSC (18), a CREO (12) y a los ‘Independientes (14) puede captar (total: 70) la presidencia de la Asamblea… si se les une algunos independientes o nuevos traidores, o sea, 4 para ser mayoría.

B. LA 2ª VUELTA: ¡Ganaron la mentira y la ignorancia!
1. Las 2 opciones eran: Continuar el programa de Lenin Moreno con Lasso o Cambiar y mejorar con Arauz.
2. En una campaña electoral sucia, la meta de la derecha fue desprestigiar a Andrés Arauz y aislarlo, y lo lograron.
3. Las ‘izquierdas’ (PK, ID) aceptaron la apuesta del imperio de votar nulo: Así quitaron votos a la RC.

4. Gana Guillermo Lasso
• ¡Llama mucho la atención que Andrés Arauz sólo logra convencer a 4% más del electorado mientras Guillermo Lasso alcanza captar 12% más! Hemos de preguntarnos cómo logró tal hazaña…
• Se le dio un visto bueno para robarnos, explotarnos y destruir la naturaleza y el país. ¡Tendremos más de lo mismo, pero ahora en toda legalidad y mucha desventaja!
5. El ejemplo de Bolivia queda para la historia: Después de un año, restituyó en el poder al partido de Evo Morales. Pero los pobres y los Indígenas de Bolivia son mucho más conscientes, organizados y decididos que los de Ecuador.

C. LAS ASTUCIAS DE LOS CAPITALISTAS Y LA INGENUIDAD DE LOS ECUATORIANOS
1. La victoria de Guillermo Lasso es el resultado de un trabajo de años dirigido por la embajada norteamericana y en unión con los representantes de las clases dominantes de Ecuador y de América Latina, con la ayuda permanente de los Medios de Comunicación comerciales.

2. He aquí unos antecedentes para entender la calidad de la manipulación que llevó Guillermo Lasso a la presidencial de la república.
a) El primer golpe a la hegemonía norteamericana fue el triunfo de la revolución cubana en 1959. Ya el capitalismo no es el dueño único de la globalización económica. Otra forma de globalización está en marcha con el apoyo interesado de Rusia y con China.

b) En los años 1970 los EE.UU. crean una Agencia para su Política Exterior para enfrentar los peligros a su hegemonía. Esta Agencia, liderada por Rockefeller, organiza una visita a los países latinoamericanos para precisar estos peligros. El resultado es el primer Documento de Santa Fe (del nombre de una ciudad norteamericana) publicado en 1980.
c) Según el primer Documento de Santa Fe, los peligros para la hegemonía norteamericana son 3:
• El avance de las ideas socialistas de los grupos de izquierda, apoyados por Rusia.
• Las organizaciones populares y políticas opuestas a los gobiernos y empresas capitalistas.
• Las orientaciones de Iglesia católica y los países y diócesis que siguen el Concilio Vaticano 2 (Roma 1962-65) y el Documento de Medellín (segunda Conferencia Episcopal Latino Americana en 1968).

d) El gobierno de EE.UU. pone en marcha su plan de destrucción de estos 3 espacios. Desde entonces vienen las dictaduras latinoamericanas y los asesinatos a las personalidades civiles, militares y religiosas señaladas en el primer documento de Santa Fe.
e) Ahora estamos bajo el 4° Documento de Santa Fe que busca impedir la llegada de gobiernos progresistas en América Latina.
• El gobierno de EE.UU. destruyó todos los intentos de gobiernos progresista en América Latina, menos Cuba y Venezuela.
• Sufrieron golpes de Estados ‘blandos’ o ‘de las Asambleas legislativas: Honduras, Paraguay, Panamá, Argentina, Brasil, Chile, Bolivia… y ahora Ecuador.

3. Para EE.UU. el gobierno de Rafael Correa no podía continuar… Había desprestigiarlo y perseguir sus miembros
a) Dio varias rupturas contrarias a las intereses norteamericano:
• Cierre de la Base naval de Manta,
• Creación Medios Públicos de Comunicación,
• Economía independientes de los grandes grupos tradicionales de poder,
• Pago de impuestos por parte de los ricos y control de salida de dólares,
• Mayor repartición de la riqueza nacional,
• Fortalecimiento de los sectores de la salud, la educación, las personas especiales y mayores…
• Transformación nacional con represas eléctricas, carreteras renovadas, turismo, cultura…

b) Los pasos para desbancar a Rafael Correa y desterrar al correísmo…
• A eso se dedicaron los Medios de Comunicación comerciales con las campañas de odio, desprestigio, mentira…
• El primer intento de golpe de Estado fue la rebelión policial del 30 de septiembre de 2010, donde el vicepresidente Lenin Moreno era listo para sustituir a Rafael Correa (información desde Cuba)…
• La traición del presidente Morena, una vez electo, fue planeada con mucha anticipación…
• El triunfo de Guillermo Lasso es el resultado de una gran manipulación… por nuestra ingenuidad, ignorancia y pasividad… ¡Nos hemos dejado “lavar el cerebro”!

C. LAS CONSECUENCIAS SON REGIONALES Y CONTINENTALES
Con la victoria de Guillermo Lasso, se da grandes retrocesos en la situación nacional, en particular al proceso popular nacional. Recordemos 1979: Se votó por el nacionalismo de Jaime Roldos. Desde esta fecha, las orientaciones por las votaciones fueron alejarse cada vez más la derecha (L. Febrés, S. Duran, R. Borja, J. Mahuad, A. Bucaram… R. Correa).
1. La traición de Moreno afecta no sólo el programa de la campaña presidencial y el proyecto social de la RC, sino el proceso de conciencia popular de 40 años. Los pobres quedan totalmente indefensos.

2. El triunfo de Lasso es el triunfo de los explotadores de siempre. Se trata de la unión continental de la derecha capitalista.
• Está dirigida por el gobierno de EE.UU. y sus embajadas en cada país.
• Está unida al nivel latinoamericano.
• Está organizada en cada país, en particular en Ecuador con la unión de los partidos de derecha (PSC y CREO), las varias Cámaras y sus Medios de Comunicación comerciales.
La derecha continental logró que se confirme el fortalecimiento del neoliberalismo a favor de sus privilegios. Más todavía: “¡Los Medios de Comunicación (de la derecha) lograron que el pueblo festeje su ignorancia!”

3. Se da un fuerte golpe a la integración latinoamericana.
• La integración latinoamericana es naturalmente anticapitalista, o sea, opuesta a un sistema de explotación y antiimperialista, o sea, opuesta a la dominación norteamericana.
• Cuba y Venezuela se han desligado de esta dominación capitalista e imperialista.
• México, Argentina y Bolivia están en esa lucha.
• Honduras, Paraguay, Panamá, Uruguay y Chile han sido sacados de esta integración.

• Brasil y Chile luchan para cambiar de gobierno.
• Colombia es un país ocupado por EE.UU. con 9 bases militares… y cada semana asesinan regularmente sus líderes sociales, tanto mestizos como indígenas.
4. Hay un pecado del clero y la jerarquía por no analizar reconocer los desafíos del ni enfrentarlos: los destrozos humanos y naturales del neoliberalismo, la destrucción del proceso popular y sus anhelos, la derechización del movimiento indígena…

• Por su silencio y complicidad, se hacen responsables de la situación de pobreza de la mayoría de los ecuatorianos.
• Por otra parte, el opus dei será muy activo en el Ministerio de la Educación, ya que varios de sus miembros son de este movimiento militante.
Así fue el proceso que llevó Guillermo Lasso a la presidencia de Ecuador.

CONCLUSIÓN: Eso fue el golpe ‘blando’ de Estado en las Elecciones de 2021.

D. CARACTERÍSTICAS DEL GOBIERNO DE GUILLERMO LASSO
Para hacerse una idea del gobierno de Guillermo Lasso sólo hace falta mirar los países que sufrieron esta clase de golpes: Honduras, Paraguay, Panamá…

1. Una continuidad desastrosa
Guillermo Lasso se parece a León Febrés Cordero de PSC (Partido Social Cristiano, de Jaime Nebot). Además es miembro activo del opus dei. Estas 2 entidades son las más conservadoras y tradicionalistas del país.
• El gobierno (1984-88) de León Febrés Cordero fue el más sanguinario de los últimos 40 años.
• El ‘opus dei’ es la secta más tradicionalista y activa en la Iglesia católica, en particular entre los cristianos de la clase alta, el clero y la jerarquía. Su creación (1928) tuvo lugar en el tiempo de la dictadura española (1936-1975) , por el sacerdote español Josemaría Escrivá de Balaguer (1902-1975), con el visto bueno del general Francisco Franco (1892-1975).
2. “¡Mano dura con guantes de seda!”

• Claro el gobierno de Guillermo Lasso se va a dar una falsa imagen de bondadoso y progresista, con la ayuda de los Medios de Comunicación.
• Sus ministros y simpatizantes nos van a regalar ‘migajas’ para acallarnos y entretenernos. Pero ellos se quedaron con ‘todo el pastel’. Será el método del imperio romano: “¡Pan y circo!”, es decir “Migajas de pan” para que no nos moramos de hambre y “mucho circo” para que estemos divertidos y nos quedemos quietos.
3. Regresamos a los tiempos del ‘feriado bancario’ del año 2000.
• El mismo Guillermo Lasso fue el mentor y el gran beneficiado del feriado bancario.

• Por la devaluación del 100%, los depositantes perdieron la mitad de su dinero depositado a los bancos, mientras los banqueros ganaron 10 veces más. Ejemplo de Guillermo Lasso cuya parte de su fortuna pasó de 30 a 300 millones en pocos meses.
• Luego el Estado ayudó a los bancos a restituir parte del dinero depositado. Costo al país el equivalente del presupuesto anual: en ese tiempo, 7’000 millones de dólares.
• En el año 2000, migraron la cuarta parte de los ecuatorianos, o sea, 3 millones de personas. Fueron ellas, con sus remesas quienes ayudaron al país a levantarse…

E. LAS CEBs: JUNTOS SER SOLIDARIDAD Y CREAR ALTEYNATIVAS.
Tenemos que estar claros sobres la situación catastrófica del país y nuestras limitadas, pero reales, posibilidades de salir adelante, o sea, de sobrevivir. ¡Sí, podemos vivir bien, si así lo decidimos!

1. Resumiendo: Se dará la continuidad y profundización maléficas del modelo neoliberal.
• Se cumplirá lo que decidió el FMI: más privatizaciones, más impuestas a las clases medias y populares, el Estado a servicio de los ricos…
• En 2021 hay altos intereses de la deuda externa que pagar: ¡20’000 millones!
• Se profundizarán la pobreza, el desempleo, el aumento de la canasta básica, el costo de la salud y la educación… la represión y la migración.
• Seguiremos desprotegidos y explotados por el gobierno de los banqueros y grandes empresarios, interesado en aumentar sus ganancias.

2. Este es el camino para enfrentar mejor la situación: “Juntos resistir y vivir lo que soñamos”.
• Juntos… porque individualmente es imposible enfrentar el sistema que nos rige y domina.
• Resistencia colectiva: Apoyarnos en la familia, el barrio, la Comunidad, la parroquia (lo social), las Asociaciones, los sindicatos, las organizaciones políticas.
¿Quiénes vamos a integrar estos espacios para ser sal adentro y luz para los demás miembros de la Comunidad?
• Solidaridad alternativa… para crear espacios alternativos en lo económico, lo político, lo social, lo cultural, lo espiritual y eclesial.
¿Quiénes vamos a entrar en estos espacios alternativos para ser luz para los demás y fermento en estas alternativas?

F. LA FUERZA DE NUESTRA FE ESTÁ EN NUESTRAS COMUNIDADES
1. Palabras de Dios
• Jesús: “¡No temas, pequeño rebaño, porque al Padre le agradó darles el Reino!” (Lucas 12,32).
• María: “Deshizo a los soberbios y sus planes. Derribó a los poderosos de sus tronos y exaltó a los humildes. Colmó de bienes a los hambrientos” (Lucas 1,51-53).
• Pablo: “Dios ha elegido lo que el mundo tiene por débil para confundir a los fuertes” (1 Corintios 1,27).
• Juan: “¡Ya llegaron la liberación, el poder y el Reinado de nuestro Dios!” (Apocalipsis 12,10).
• Jesús: “¡Busquen primero el Reino de Dios y lo demás vendrá por añadidura!”
2. Las orientaciones del papa Francisco en su Carta ‘Todos somos hermanos y hermanas’

El papa Francisco nos apremia a construir la hermandad universal mediante 4 compromisos:
• El compromiso personal de la fraternidad sin frontera, es decir, abierta a todas y todos en todas partes,
• El compromiso colectivo de la amistad social, es decir, abierta a la dimensión socio-cultural de todos los pueblos,
• El compromiso organizado del amor político, es decir, abierto a la integración en actividades y movimientos políticos, y
• El compromiso decidido de una espiritualidad liberadora, es decir, enraizada en la unión entre acción y contemplación y en la opción por las causas de los pobres.
3. Un medio a nuestro alcance: La preparación de la 1ª Asamblea Eclesial de América Latina y El Caribe, México, noviembre de 2021.
Las características de esta Asamblea Eclesial (Guía 1): Con la participación de todos los bautizados.

1° paso: Ver nuestra realidad (Guías 2, 3 y 4), para no engañarnos.
• Social, con sus causas y los desafíos que nos plantea.
• Ambiental, con sus causas y los desafíos que nos plantea.
• Eclesial, con sus causas y los desafíos que nos plantea.
2º paso: Iluminar esta realidad (Guías 5 y 6), para sentirnos más fuertes.
• Haciendo memoria de Aparecida: Ser discípulos de Jesucristo y misioneros del Reino.
• A la luz de la Palabra de Dios: Mateo 7,23-27 (La tempestad calmada).
3º paso: Actuar en favor de la vida plena abriendo nuevos caminos (Guías 7 y 8).
• Caminos nuevos al servicio de los Pueblos, especialmente los más marginados.
• Caminos nuevos al servicio de una Iglesia renovadas, es decir, nosotros como personas e institución.

NO HAY MÁS QUE UN CAMINO :
“ JUNTOS EN COMUNIDADES SER SOLIDARIOS Y CREAR ALTERNATIVAS ! ”

Anexo : CARÁCTERÍSTICAS DEL GOBIERNO DE LENIN MORENO

Se dan grandes retrocesos a todos los niveles. Había que revertir todo lo que hizo Rafael Correa.

1. En lo político
• Pocos días después de su posesión el presidente Moreno traiciona su programa de campaña de Alianza PAIS y entrega su gobierno a los grupos de derecha. Lo siguen en esta traición 30 asambleístas (sobre 72).
• Gobiernan los que rechazamos en la votación presidencial de 2017 (Lasso-Nebot-Bucaram).
• Se elimina las deudas (4’000 millones de dólares) y se reduce los impuestos de los empresarios.

• Se firma la sumisión al FMI: Se fortaleció el neoliberalismo, o sea, los ricos serán más ricos a costa de los pobres más pobres.
• En el referendo de 2017, con apoyo del ‘7 veces sí’, se legaliza la destrucción del Estado y la impunidad de los corruptos.
• Está de acuerdo con todo esto el Movimiento indígena (CONAIE y Pachakutik) con los “ponchos dorados”: nombre que se dio a las y los que se venden a las ONG y a la derecha, sus amos de siempre.

• La persecución sistemática a los integrantes de la Revolución Ciudadana: Apresamiento del vicepresidente por criticar el giro a la derecha del gobierno, condenación sin pruebas al ex presidente Rafael Correa, exilio de otras personalidades…
• Al nivel internacional se dan: 1. El retiro del asilo a Julián Assange, periodista internacional de primera plana, en Inglaterra para dar gusto al gobierno norteamericano. 2. El reconocimiento de Juan Guaidó como presidente (ilegítimo) de Venezuela. 3. La retirada de Ecuador de la integración latinoamericana (UNASUR).

2. En lo económico
• La implementación de las recetas del FMI: Primero pagar las deudas, reduciendo los gastos sociales, eliminando los derechos laborales (horarios, salarios, despidos, anti-sindicalismo…)
• Se elimina el control de la salida de dinero del Ecuador hacia los paraísos fiscales, donde habría más de 30’000 millones de dólares (la mitad del actual presupuesto estatal anual).
• Las denuncias de corrupción, del dinero en paraísos fiscales de ministros y del mismo presidente no surten efectos.
• Al mismo tiempo que se baja el precio de los combustibles por el levantamiento popular se deja libertad a las gasolineras para aumentar su costo.

• El aumento de 20% de la pobreza igual a su disminución en tiempos de Rafael Correa, o sea, actualmente más de la mitad de la población.
• No hay realización de obras nacionales, a pesar de los préstamos del FMI, ni de la recuperación agrícola o industrial.
3. En lo socio-cultural
• Hay una total desinformación y manipulación de los grandes Medios de Comunicación Social.
• Se da una campaña incesante de odio contra los miembros de la Revolución Ciudadana.
• Se incrementa la persecución a los periodistas opositores y cierre de sus medios informativos.
• 1 millón de despidos de funcionario del Estado en particular en la salud y la educación.

• Violencia policial y militar desmesurada contra los manifestantes pacíficos de octubre de 2019: 11 muertos indígenas, 14 ojos dañados por las balas de caucho de la policía, 1400 heridos, 1300 presos.
• Las Universidades pasan a ser ‘sucursales’ de las empresas capitalistas, y no centro de formación humana e intelectual.
• Aumento del mercado de las drogas y de la delincuencia.
• La pandemia hace estragos porque nos encuentra desprevenidos y desprotegidos.

4. En lo eclesial
• La mayoría del clero feliz… en particular los del opus dei, del cual Lasso es miembro activo y benefactor.
• No hay una renovación pastoral ni una opción por los pobres a pesar de las invitaciones y del testimonio del papa Francisco.
• Sigue vigente el clericalismo: Todo gira en torno a los sacramentos, pagados, y al sacerdote que lo decide todo… a pesar del testimonio evangélico del papa Francisco.

Nota: Ver el artículo de Irene León de la revista ALAI (Agencia Latino Americana de Información, Quito): https://www.alainet.org/es/articulo/211949

«Quien le compró la tierra a Dios?»

Adolfo Pérez Esquivel: «¿Quien le compró la tierra a Dios?»
«El sistema liberal se fue apoderando de las tierras, antes y ahora, excluyendo a las dos terceras partes de la población, concentrando el poder económico y político»
«Las desigualdades sociales e injusticias se profundizany ponen en riesgo los DDHH y la democracia»
«¿Cómo puede ser que la empresa Benetton sea dueña de un millón de hectáreas? -otras empresas como Lewis, Turner poseen otras tantas-«
«La Argentina es un país productor de alimentos, con territorio suficiente y de gran biodiversidad, pero hay grandes sectores del pueblo con hambre, imposibilitados de tener los recursos básicos para sus vidas»
24.11.2020 | Adolfo Perez Esquivel, Nobel de la Paz
El sistema liberal se fue apoderando de las tierras, antes y ahora, excluyendo a las dos terceras partes de la población, concentrando el poder económico y político. La tierra fue y es eje de disputa, luchas y rebeliones, no es mi intención profundizar éste problema que duele en la vida de los pueblos. Quiero hacer referencia a hechos vividos donde la tierra es el centro de la vida o muerte de sectores campesinos, indígenas o pobladores que buscan donde vivir, son “los desheredados de la tierra”.
Ciro Alegría escritor peruano en una de sus obras dice “El mundo es ancho y ajeno”• Hace años en el Nordeste de Brasil, acompañé a Dom Helder Cámara, Arzobispo de Olinda y Recife, a una favela en disputa por las tierras en las que estaban asentados desde hacía varios años; una empresa multinacional quería expulsarlos pidiendo su desalojo y llevaron el problema a los tribunales.
En la gran sala del juzgado los micrófonos no funcionaban y el pueblo no escuchaba el debate entre los abogados y los jueces. Los pobladores prepararon dos grandes carteles preguntandoa los jueces “¿Quién le compró la tierra a Dios?-La tierra es de quien la trabaja». Podría seguir señalando la situación de la tierra en todo el continente y en nuestro país, como el despojo a los pueblos originarios, los Mapuches, los Qom, los Guaraníes, entre otras víctimas por el poder de turno.
Los pueblos buscan alternativas para encontrar nuevos caminos como el MST-Movimiento de los Sin Tierra en Brasil, la producción de semillas orgánicas y no transgénicas, experiencia en muchos productores rurales, las Comunidades campesinas en Paraguay, Guatemala, Las Ligas Agrarias en Argentina y organizaciones como el MOCASE, MOCAFOR y el MAN, entre otros movimientos campesinos.
Las desigualdades sociales e injusticias se profundizany ponen en riesgo los DDHH y la democracia. El 29-10-20 fue un día triste se manifestó en la toma de tierras en Guernica, los pobres buscaron un lugar donde poder levantar sus viviendas, siendo desalojados por la fuerza policial con 4 mil efectivos en forma violenta, cortando la luz, lanzaron gases lacrimógenos, balas de goma, incendiando las casillas precarias de los pobladores, algunos se quedaron y resistieron con gomeras, piedras y palos.
La orden judicial fue desalojarlos sin tener en cuenta los niños/as, ancianos, mujeres, víctimas de la violencia policial y judicial. Es cierto que el gobierno de la provincia buscó el diálogo para resolver la situación con apoyo económico y la promesa de encontrar otro lugar dónde levantar sus viviendas, el enfrentamiento con la policía dejó como saldo 40 detenidos. Varios organismos de DDHH enviaron veedores para evitar la violencia policial entre ellos la CPM, el CELS, el SERPAJ, la APDH de la Matanza. Buscando dialogar con las autoridades y que no utilicen la violencia contra los pobladores considerando la cantidad de niños/as, mujeres y ancianos.
Los pobres son excluidos del sistema y víctimas de la represión, hubo sectores del periodismo canalla, señalando que eran delincuentes troskistas, no victimas de una situación injusta del sistema, levantando en los programas periodísticos la defensa de la propiedad privada y guardan silencio sobre el uso y abuso de los terratenientes que compran lo que no les pertenece, podemos comprobarlo en el ayer y el hoy.
La pregunta es: ¿Cómo puede ser que en el país empresas extranjeras compren grandes extensiones de territorio expulsando a los pueblos originarios y campesinos en la Patagonia?, ¿cómo puede ser que la empresa Benetton sea dueña de un millón de hectáreas? -otras empresas como Lewis, Turner poseen otras tantas-. Las empresas mineras, los monocultivos de los terratenientes; ¿de que propiedad privada hablan? Los medios de comunicación guardan silencio cómplice.
Vuelvo a la pregunta de los pueblos ¿Quién le compro la tierra a Dios? Los pobres, los campesinos, los pueblos originarios son expulsados y violentados sin defensa alguna. La CPM-Comisión Provincial por la Memoria es un ente autárquico oficial que aporta su trabajo en defensa de los DDHH, sus integrantes son ad honoren.
Otro hecho que sacudió la vida y conciencia del pueblo fue en la Provincia de Entre Ríos donde la señora Dolores Etchevehere generosamente ofreció al Proyecto Artigas tierras para desarrollar proyectos productivos orgánicos, actitud que desató la furia de sus hermanos, un problema familiar que llegó a los tribunales, los jueces decidieron que el derecho de las tierras correspondía a los hermanos de Dolores. Los integrantes del Proyecto Artigas con Juan Grabois se retiraron de la estancia. Es un capitulo no cerrado que tiene que aclararse ante la justicia y rendir cuentas de la discriminación de género a Dolores quien denuncia el vaciamiento de las empresas familiares.
Las tensiones vividas esos días en distintos contextos llevó a la superficie el debate muchas veces silenciado sobre la reforma agraria y la propiedad privada. La propiedad debe estar en función social, lo que significa que toda persona tiene derecho a la propiedad individual y que el Estado debe asegurar.
Estoy de acuerdo con Juan Grabois que el país necesita de una reforma agraria, la distribución justa y el derecho alas 3 TTT-tierra-techo y trabajo. Debe ser política de Estado proveer la distribución justa y protección de los recursos naturales deben cumplir una función social y no confundir desarrollo con explotación. Es necesario lograr el equilibrio entre las necesidades del ser humano y el respeto a la Madre Tierra, lamentablemente violentada por la especulación financiera, los desmontes, quema y destrucción del medio ambiente con agro-tóxicos, provocando graves daños y contaminación del agua y la tierra, por la mega-minería, los monocultivos y la quema de la floresta como en la Amazonía, Australia, Argentina y diversos países.
La pandemia del Covid 19 que afecta al mundo es la consecuencia del daño que el ser humano provoca a la Madre Tierra; si no se restablece el equilibrio y continúa la explotación y devastación actual el mundo se dirige a un suicidio colectivo. Los indicadores están a la vista, calentamiento global, contaminación, los agro-tóxicos y destrucción de la biodiversidad.
La otra pandemia que avanza peligrosamente es el “hambre”. El mundo produce alimentos suficientes para superar el hambre pero hay más hambrientos. Josuè de Castro decía que el hambre es la manifestación biológica de una enfermedad sociológica. La forma de enfrentar el hambre antes que sea tarde es la soberanía y seguridad alimentaria que está en el pequeño y mediano productor rural, no en las grandes empresas agrícolas, ni en los transgénicos.
Es urgente avanzar con políticas públicas en la solución alimentaria y restablecer el equilibrio con la Madre Tierra y la producción orgánica, el desafío es volver a las fuentes. La Argentina es un país productor de alimentos, con territorio suficiente y de gran biodiversidad, pero hay grandes sectores del pueblo con hambre, imposibilitados de tener los recursos básicos para sus vidas. La desigualdad social se profundiza y hay que buscar caminos superadores de la profunda crisis que viven los pueblos

«La Covid-19 cuestiona el sentido de la vida»

Leonardo Boff: «Sin políticas públicas, las personas serían tragadas por un destino atroz»
«Los mantras del neoliberalismo fueron destrozados. ¿Sirvió para algo el lema de Wall Street “la codicia es buena”? Nadie come computadoras, ni se alimenta de los algoritmos de la inteligencia artificial»
«Todo el mundo habla de la medicina, de la técnica, de los insumos y especialmente de la búsqueda ansiosa de una vacuna contra la Covid-19. Pocos hablan de la naturaleza»
18.11.2020
La irrupción de la Covid-19, alcanzando a todo el planeta y matando a más de un millón de vidas sin poder ser veladas ni recibir el cariño último de sus familiares, además de infectar a otros muchos millones de personas, plantea la inquietante pregunta: ¿Cuál es el sentido de la vida? ¿Por qué todo este sufrimiento? ¿Qué nos quiere decir la naturaleza con este virus invisible que ha puesto de rodillas a todas las potencias militares, haciendo ineficaces sus armas de destrucción masiva? La Covid-19 cayó como un meteoro sobre el sistema del capital y el neoliberalismo. Sus mantras fueron destrozados. ¿Sirvió para algo el lema de Wall Street “la codicia es buena”? Nadie come computadoras, ni se alimenta de los algoritmos de la inteligencia artificial.
¿Cuáles eran los dogmas de la fe capitalista y neoliberal?: Lo esencial es el lucro, en el menor tiempo posible, la competencia feroz, la acumulación individual o corporativa, el saqueo cruel de los recursos de la naturaleza, dejando las externalidades por cuenta del estado, la indiferencia ante la tasa de iniquidad social y ambiental, la postulación de un Estado mínimo para escapar de las leyes limitantes y poder acumular más libremente.
Si hubiésemos seguido estos mantras, el exterminio de vidas humanas habría sido incalculable. Sin políticas públicas, las personas serían tragadas por un destino atroz.¿Qué nos ha salvado? Aquellos valores y actitudes ausentes en el sistema del capital y el neoliberalismo: darnos cuenta de que no somos “dioses” sino totalmente vulnerables y mortales, expuestos a lo imprevisible. Lo que cuenta no es el lucro sino la vida; no es la competencia sino la solidaridad; no es el individualismo sino la cooperación entre todos; no el asalto a los bienes y servicios de la naturaleza sino su cuidado y protección; no un estado mínimo, sino el estado suficientemente pertrechado para atender las demandas urgentes de la población. Dicho directamente: ¿qué vale más, la vida o el lucro? ¿La naturaleza o su expoliación desenfrenada?
Responder a estas preguntas inaplazables es interrogarse sobre el sentido o el absurdo de nuestra vida, personal y colectiva. El aislamiento social es una especie de retiro existencial que la situación nos ha impuesto. Se crea la oportunidad de hacer estas preguntas ineludibles. Nada es fortuito en este mundo. Todo guarda una lección o un sentido secreto que debe ser revelado, por más desconcertante que sea la realidad. Lo que no podemos permitir es que este sufrimiento colectivo sea en vano. Funciona como un crisol que purifica el oro, que acrisola nuestra mente, y pone en jaque ciertos hábitos para ser revisados y otros nuevos para ser incorporados, especialmente en lo que se refiere a nuestra relación con la naturaleza y el tipo de sociedad que queremos, menos perversa y más solidaria.
Todo el mundo habla de la medicina, de la técnica, de los insumos y especialmente de la búsqueda ansiosa de una vacuna contra la Covid-19. Pocos hablan de la naturaleza. Pero es necesario considerar el contexto del brote del coronavirus. No está aislado. Vino de la naturaleza que durante siglos fue saqueada irresponsablemente por el proceso industrial del capitalismo y también del socialismo, en la falsa suposición de que la Tierra tendría recursos infinitos. Hemos deforestado despiadadamente y destruido así los hábitats de miles de virus que viven en los animales e incluso en las plantas. Al perder su “morada natural”, buscan en nosotros un sitio para sobrevivir. Así hemos conocido una amplia gama de virus como el zica, el chikungunya, el ébola, las series derivadas del SARS, como el de la Covid-19 entre otros.
Se trata de un contraataque de la naturaleza o de la Madre Tierra contra la humanidad, con el que quiere darnos una severa advertencia: “detengan la agresión despiadada, que destruye las bases físico-químicas-ecológicas que sostienen vuestra vida; de lo contrario podríamos enviarles virus mucho más letales que podrían diezmar a miles de millones de ustedes, de la especie humana, y afectar gravemente a la biosfera, ese fino manto un poco mayor que el filo de una navaja que garantiza la continuidad de la vida”.
¿Prevalecerán estas advertencias vitales o el afán de acumular y asegurar intereses materiales? ¿Tendremos suficiente sabiduría para responder a la alternativa que el Ser que hace ser a todos los seres nos presenta?: “Te propongo la vida y la muerte, la bendición y la maldición; elige la vida para que puedas vivir con tu descendencia” (Dt 30:19). Portadores de una fe en un Dios “apasionado amante de la vida” (Sab 11,26) apostamos todavía por un sentido de la historia y de la vida. Ellas escribirán la última página de la saga humana, construida con tanto esfuerzo en este planeta.
Esto sin embargo no debe desviar nuestra mirada de lo que está ocurriendo en el escenario mundial y específicamente en el brasilero, donde un jefe de estado negacionista no tiene como proyecto cuidar de su pueblo y de nuestra exuberante naturaleza. Con desprecio e ironía se comporta como Nerón que presenciaba como Roma ardía tocando la cítara.
A pesar de todo esto, nuestra esperanza no muere. Como afirma la Fratelli tutti del Papa Francisco: “La esperanza nos habla de una realidad enraizada en lo profundo del ser humano, independientemente de las circunstancias concretas y los condicionamientos históricos en los que vive” (Nº 55). Aquí resuena el principio esperanza, que es más que una virtud, es un principio, un motor interior que proyecta nuevos sueños y visiones, tan bien formulados por el filósofo alemán Ernst Bloch en El principio esperanza. Esta esperanza nos recuperará el sentido de vivir en este pequeño y amado planeta Tierra.
Aunque somos seres contradictorios, hechos simultáneamente de luz y de sombras, creemos que la luz triunfará. Muchos bioantropólogos y neurocientíficos nos confirman que somos por esencia seres de bondad y de cooperación. Prevalece una bondad fundamental en la vida.
El hombre común, que conforma la gran mayoría, se levanta, gasta un tiempo precioso en los autobuses, va al trabajo, a menudo duro y mal pagado, lucha por su familia, se preocupa por la educación de sus hijos, sueña con un país mejor. Sorprendentemente, es capaz de hacer gestos generosos, ayudar a un vecino más pobre que él y, en casos extremos, arriesgar su vida para salvar a una niña inocente amenazada de violación. En él está actuando el principio esperanza.
En este contexto, no me resisto a citar los sentimientos de uno de nuestros más grandes escritores modernos, Erico Veríssimo, en su famoso “Contempla los lirios del campo”.
Si en ese momento un habitante de Marte cayera a la tierra, se asombraría al ver que en un día tan hermoso y suave, con un sol tan dorado, la mayoría de los hombres estaban en oficinas, talleres, fábricas… Y si le preguntase a alguno de ellos: ‘Hombre, ¿por qué trabajas tan furiosamente durante todas las horas de sol?’ – escucharía esta singular respuesta: ‘Para ganarme la vida’. Y sin embargo, la vida allí se ofrecía a sí misma, en una milagrosa gratuidad. Los hombres vivían tan ofuscados por los deseos ambiciosos que ni siquiera se daban cuenta. Ni con todas las conquistas de la inteligencia habían descubierto una manera de trabajar menos y vivir más. Se agitaban en la tierra y no se conocían, no se amaban como debían. La competencia los convirtió en enemigos. Y hacía muchos siglos, habían crucificado a un profeta que se había esforzado por mostrarles que eran hermanos, sólo y siempre hermanos. (Ver Lírios do Campo, Civilização Brasileira, Rio de Janeiro 1973. p. 292).
La irrupción de la Covid-19 reveló estas virtudes, presentes en los humanos pero especialmente en los pobres y las periferias, porque se refugiaron allí, ya que la cultura del capital reina en las ciudades, con su individualismo y falta de sensibilidad ante el dolor y el sufrimiento de las grandes mayorías de la población. ¿Qué se esconde detrás de estos gestos diarios de solidaridad? Se esconde el principio esperanza y la confianza de que, a pesar de todo, vale la pena vivir porque la vida, en su profundidad, es buena y fue hecha para ser llevada con coraje que produce autoestima y sentido de valor.
Hay aquí una sacralidad que no viene bajo el signo de lo religioso sino bajo la perspectiva de lo ético, del vivir correctamente y del hacer lo que debe ser hecho. El reconocido sociólogo austríaco-norteamericano Peter Berger, ya fallecido, escribió un libro brillante, relativizando la tesis de Max Weber sobre la total secularización de la vida moderna con el título: Un rumor de ángeles: la sociedad moderna y el redescubrimiento de lo sobrenatural (Voces 1973/2013). Allí describe numerosos signos (los llama “rumor de ángeles”) que muestran lo sagrado de la vida y el significado secreto que siempre tiene, a pesar de todo el caos y las contradicciones históricas.
Voy a dar, siguiendo a Peter Berger, sólo un ejemplo banal, conocido por todas las madres que cuidan a sus hijos por la noche. Uno de ellos se despierta asustado. Tiene una pesadilla, se da cuenta de la oscuridad, se siente solo y se deja llevar por el miedo. Grita llamando a su madre. Esta se levanta, toma al niño en su regazo y en un gesto primordial de magna madre le acaricia y le da besos, le dice cosas dulces y le susurra: “Hijito, no tengas miedo; mamá está aquí. Todo está bien, no pasa nada, querido”. El niño deja de sollozar. Recupera su confianza y poco después se duerme, tranquilo y reconciliado con la oscuridad.
Esta escena común esconde algo radical que se manifiesta en la pregunta: ¿no está la madre engañando al niño? El mundo no está en orden, no todo está bien. Y sin embargo estamos seguros de que la madre no engaña a su hijo. Sus gestos y sus palabras revelan que, a pesar del desorden imperante, reina un orden profundo y secreto.
Así que creemos que los tiempos de la Covid-19, tan dramáticos, pasarán. Esperamos, y cómo esperamos, que por debajo y dentro de ellos se va fortaleciendo un orden escondido que irrumpirá cuando todo pase. De esta manera, la sociedad y toda la humanidad podrán caminar hacia un sentido mayor, cuyo diseño final se nos escapa. Pero siempre hemos intuido que existe y que será bueno. Él será quien escriba la última página con un final feliz. Como escribió el filósofo del Principio Esperanza, Ernst Bloch, verificaremos que el verdadero génesis no fue al principio de las cosas sino al final. Sólo entonces será verdad: “Dios vio todo lo que había hecho y le pareció muy bueno” (Gen 1:31).

¿La muerte del neoliberalsmo?

Frei Betto: «¿Quién se arriesga a predecir la muerte del neoliberalismo?»
Una parte considerable de mi generación se formó en la concepción de que el determinismo histórico era inexorable y se correspondía con las leyes objetivas del mundo natural
Con toda esa catedral dogmática implantado en la mente, algunos entramos en contacto con la física. La teoría general de la relatividad modificó nuestro concepto del tiempo y el espacio
Aun así, ¿cómo concebir que el tiempo no fluye en dirección al presente que se transmuta en pasado al preanunciar el futuro? Futuro que hoy parece condenado a perpetuar el presente
Ahora, cuando se constata que algo en la esfera subatómica parece contradecir todas las leyes, no solo de la dialéctica, sino también de la naturaleza, el determinismo histórico pasa al museo de la historia de las ideas
La cosmología actual sin dudas ampliará nuestros horizontes, y la física cuántica nos ayudará a percibir que, una vez garantizados los derechos humanos, la libertad consistirá en la osadía de sumergirnos en nosotros mismos
26.11.2020 Frei Betto
Futuro que hoy parece condenado a perpetuar el presente. ¿Quién se arriesga a predecir la muerte del neoliberalismo? Parece tan sólido como el socialismo soviético pregonado por los teóricos de izquierda hasta mediados de la década de 1980. Nadie, hasta entonces, previó la caída del Muro de Berlín.
Una parte considerable de mi generación se formó en la concepción de que el determinismo histórico era inexorable y se correspondía con las leyes objetivas del mundo natural. Aun reticentes en cuanto a toda corriente filosófica que profesara el ateísmo como convicción religiosa, muchos llegamos a creer que las leyes del materialismo dialéctico eran la suprema objetivación de la mente humana. Bastaba saberlas aplicar a los fenómenos naturales e históricos para poder aprehenderlos en su génesis y su futuro.
Con toda esa catedral dogmática implantado en la mente, algunos entramos en contacto con la física. La teoría general de la relatividad modificó nuestro concepto del tiempo y el espacio. Tuvimos que abandonar la idea de un espacio amplio como escenario de los fenómenos físicos, y de un tiempo que fluía al mismo ritmo del pasado al futuro vía el presente. Orígenes suponía que el tiempo era ilimitado e infinito. Pero el tiempo, como el espacio, nació con el Universo. Antes de que algo fuera, tampoco eran el espacio y el tiempo.
Sin embargo, nos sorprendemos apegados aún a viejas concepciones. No resulta fácil abandonar los paradigmas arraigados. Transitamos, confusos, por el método empírico-inductivo de Bacon, la filosofía analítico-deductiva de Descartes, la física mecanicista de Newton, perplejos ante el espectáculo “posmoderno” en el que “todo lo sólido se desvanece en el aire”. Miramos hacia atrás, vemos el pasado de nuestras vidas, de la historia de nuestro país y del mundo. Miramos hacia adelante, avizoramos un futuro ideal, aun conscientes de que cuando se convierta en presente será distinto a nuestras quimeras. El presente no es más que un punto infinitamente pequeño, un puente diminuto entre lo que fue y lo que será.
Aun así, ¿cómo concebir que el tiempo no fluye en dirección al presente que se transmuta en pasado al preanunciar el futuro? Futuro que hoy parece condenado a perpetuar el presente. ¿Quién se arriesga a predecir la muerte del neoliberalismo? Parece tan sólido como el socialismo soviético pregonado por los teóricos de izquierda hasta mediados de la década de 1980. Nadie, hasta entonces, previó la caída del Muro de Berlín.
Lo que es tiene aires de eterno. Basta verificar el empeño de los que ocupan la cúspide de la pirámide social por preservar sus formas físicas. El elíxir de la eterna juventud se puede adquirir al fin en cualquier academia de gimnasia. Solo falta inventar el jarabe que impida la imbecilización de quien no cultiva el espíritu y piensa que la cultura es rodearse de una sofisticada parafernalia electrónica, sumergido en los encantos sensitivos del mero entretenimiento.
Ahora, cuando se constata que algo en la esfera subatómica parece contradecir todas las leyes, no solo de la dialéctica, sino también de la naturaleza, el determinismo histórico pasa al museo de la historia de las ideas. Se recomienda cautela para no botar a Marx con el agua sucia. El impacto cuántico es más fuerte de lo que se cree. El propio Einstein vaciló en aceptar los desafíos de la esfera cuántica. Le parecía intolerable la idea de que un electrón expuesto a la radiación pudiera “por su libre voluntad” –como le dijera al físico alemán Max Born– elegir qué dirección tomar. En la esfera de lo infinitamente pequeño la ciencia se ve obligada a ingresar en el imprevisible y oscuro reino de las probabilidades.
El principio deindeterminación, descubierto por otro físico alemán, Werner Heisenberg, revoluciona nuestra percepción de la naturaleza y la historia. Y nos hace tomar conciencia de que, en la naturaleza, la incertidumbre cuántica no se presenta solo en las partículas subatómicas. Miles de millones de años después del predominio cuántico en el amanecer del Universo, surgió un extraño e inteligente fenómeno dotado de la imprevisibilidad inherente a su libre albedrío: los seres humanos.
Mientras vivió, Einstein conservó la esperanza de que alguien volviera a atar las puntas de los hilos rotos por la fuerza del principio de incertidumbre. Perplejo ante el acaso, reaccionó como un médico junto al hijo irremediablemente enfermo y exclamó: “¡Dios no juega a los dados!” A pesar de su indignación, ahí están los dados y no hay ley ni cálculo que prevea el número que saldrá. Por eso vale preguntarse si, de hecho, existen fronteras definidas entre la física cuántica y la filosofía, incluida la metafísica. ¿No lo sería de la espiritualidad inherente al ser humano?
¿Dónde están las fronteras sino en los límites de nuestra propia visión? Ahora bien, es imposible aprehender el Misterio con palabras o ecuaciones. Todavía solemos encontrar personas que creen que hay dos realidades, una profana y otra religiosa. La cosmología actual sin dudas ampliará nuestros horizontes, y la física cuántica nos ayudará a percibir que, una vez garantizados los derechos humanos, la libertad consistirá en la osadía de sumergirnos en nosotros mismos, allí donde ese encuentro permite descubrir al Otro que, no siendo yo y siendo radicalmente distinto a mí, me devuelve a mí mismo, a mi verdadera identidad. De esa fuente subjetiva brota la energía que debería mover a la humanidad: el amor.